IMFarmacias_80

Ander Arrillaga (Guipúzcoa) La botica que en su día inaugurara su abuelo continúa aún abierta. Ander es la ya tercera generaciónque atiende con esmero y dedica- ción a la población de un pequeñomunicipio de Guipúzcoa. Con casi 12 mil habitantes, Elgoibar pertenecea la comarcadel BajoDeva. “Nuestroclientehabitual es el vecinodel pueblo, ya que no somos un pueblo turístico”. Farmacéutico desde 2007, completó su for- mación en el extranjero y con la realización de estudios demáster. “Mi abuelocompróesta farmaciahacemuchosaños, le relevómimadre, y ahora soy yo quien coge el testigo”, a rma Ander. “Desde muy pequeñito he pasado mu- chas horas en la farmacia, lo que fue un factor decisivo a la hora de elegir mi carrera”. Conscientedel reconocimientode laprofesión a nivel social, reivindica una mayor conside- ración del farmacéutico como parte esencial del SNS. “Podemos aportar mucho más al sis- tema. Por ejemplo, en Reino Unido el boticario puede prescribir determinados fármacos con cargo al SNS tras haber obtenido la acredita- ción necesaria para ello”, a rma, y continúa: “Si implantásemos esto en España, ayudaría a descongestionar el sistema y amejorar nuestra imagen siendo más que meros encargados de custodiar y dispensar fármacos”. Según este joven guipuzcoano el modelo se encuentra actualmente en un momento de búsqueda de identidad. “Es habitual oír que el futuro está en los servicios remunerados y que hay que dar valor a nuestra labor como garantes de una dispensación informada y de la realizaciónde un seguimientoque garantice que el paciente está tomando su tratamiento de manera segura y efectiva. Sin embargo, estas intervenciones se observan con cierto recelo desde deter- minados sectores del SNS, y su existencia es bastantedesconocida para la mayoría de la población”. Para solucionarlo Ander propone “trabajar para mejorar en este sentido, y empezar a jugar unpapel más activo comomiembrosde lacadenade funcionamien- to del SNS”. En cuanto a la in uencia de la crisis en el sector: “La farmacia comunitaria se ha visto afectada por las recesión, sobre todo porque la gente ha prescindido de determinados produc- tos como la parafarmacia y algunos fármacos; a esto han contribuido además medidas como el copago”. Los tiempos han cambiado, pero el modelo también. “La farmacia ha pasado de ser un establecimiento sanitario donde se preparaba y se dispensaba el tratamiento prescrito, a con- vertirse en un espacio donde se pretende abor- dar la salud de manera integral cubriendo las necesidades sanitarias básicas del individuo, y tratando las patologías y previniéndolas”. En este proceso de cambio uno de los retos más importantes es la incorporación de las nuevas tecnologías. “La farmaciaha evolucio- nado en la oferta de productos, pero también en aspectos estéticos como el diseño y la con- guración constituyéndose comounauténtico espaciode salud. Elmomentode cambiodigital jugará un papel importante en nuestro futuro”. Otra de las cuestiones a debate es la soste- nibilidad a largo plazo. “Considero que tirar los precios no es la estrategia más adecuada. El cliente que busca el precio más bajo es un cliente poco el ya que irá buscando la mejor oferta”, advierteAnder para concluir: “Nosotros no somos quienes tenemos que solucionar el problema de la sostenibilidad de la farmacia, si bien es cierto que seremos los principales afectados. Es la administración la que estipula nuestros márgenes netos, y la tendencia hasta ahora no augura nada bueno. No obstante, tenemos que continuar garantizando la salud de nuestros ciudadanos en el desempeño de la labor de servicio público que siempre nos ha caracterizado”. “Debemos continuar garantizando la salud de los ciudadanos en el desempeño de nuestra labor de servicio público” María Legarra (Pamplona) María es una joven pamplonesa que hace 10 años decidió dedicarse a lo que verdadera- mente le apasiona: ser farmacéutica. Desde que inaugurara su propia farmacia junto a su hermana no han dejado de trabajar por adaptar la farmacia a los nuevos tiempos. “Durante años he trabajado como adjunta y como nutricionista en distintas farmacias de Pamplonaaltiempoqueestudiabaunmásteren Dermofarmacia y Cosmetología. La formación es para mí fundamental, de hecho, considero que es el futuro de la farmacia”. Consciente de los cambios que está expe- rimentando el modelo, María se muestra optimista. “Representanunaoportunidadpara adecuarnos a las nuevas exigencias tanto del sistema como de nuestra clientela. Por ejemplo, nuestra farmacia atendía por lo general a per- sonas mayores de 65 años, pero recientemente están construyendo pisos nuevos a nuestro alrededor y esto hace que acuda gente más joven. Todo ello nos obliga a revisar nuestros planteamientos en cuantoal stock, los servicios o las categorías”, advierte, y añade: “Es impres- cindibleadaptarsea lasnecesidadesdenuestros pacientes si queremos ser su referente de salud”. En esta evolución la formación especializada ocupa un lugar privilegiado. “Consideroque la situación actual nos exige cada vezmás forma- ción. El acceso de la población a información rápida por internet nos obliga a estar al día en múltiples campos, y esto requieremás prepara- ción y conocimientos actualizados”. En contraposición, María señala la di cultad para asegurar la sostenibilidad del sistema a largo plazo. “Es un tema muy complicado y costoso, pero ello no debe suponer bajar los precios hasta cotas insostenibles porque es si- nónimo de devaluación tanto de los productos en sí, como de la propia profesión del farma- céutico. Somos profesionales muy formados, trabajamos con productos ymedicamentos de altísima calidad y no podemos depreciar todo ese esfuerzo”. La soluciónqueaportaesta jovenpamplonesa para su farmacia se basa en un cambio de mentalidad: “Desde el primer díanos tomamos >>

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=