FARMACIA ASISTENCIAL 150 La experiencia de Sara Alcaide con la salud ocular consiste en la atención directa con el paciente y, principalmente, la atención preventiva. Asesora sobre cuidados básicos y problemas comunes como sequedad ocular, ojos irritados y rojos, alergias, blefaritis, eczemas y patologías comunes varias. En la farmacia, disponen de productos que ayudan a aliviar y tratar la sintomatología relacionada con estos problemas, como, entre otros, las lágrimas artificiales de Bañoftal.“Escuchamos las preocupaciones del paciente y asesoramos para ofrecer la solución más adecuada, recomendando productos, si es necesario, y medidas higiénicas”, expresa. Piensa que la salud ocular, en nuestro país, tendría que mejorar.“Algunos pacientes no son conscientes de lo primordial que es cuidar de nuestros ojos hasta que les empiezan a molestar o notan algún problema, como sequedad o fatiga visual”, razona. Igualmente, opina que“la población todavía no está muy concienciada sobre la importancia de finalizar el tratamiento que el especialista o desde la farmacia se le ha recomendado, de la prevención en la higiene ocular o de acudir a las revisiones periódicas”. En este caso, insiste en que se juega un papel crucial desde la farmacia.“A diario, se fomenta la educación sobre hábitos saludables como, por ejemplo, hacer pausas de cinco minutos al menos cada hora cuando se está frente a una pantalla y usar productos como los de Bañoftal, que cubren toda la sintomatología susceptible de recomendación farmacéutica”, remarca. “A veces, se puede evitar la visita al especialista, ya que, con una buena recomendación de colirios o lágrimas artificiales, podemos mejorar mucho la calidad de vida del paciente y solventamos el problema que teníamos”, asevera Alcaide. El problema más consultado por sus pacientes es “la sequedad ocular, seguido de picor, irritación y enrojecimiento, segmentos en los que marcas como Bañoftal ofrecen diferentes soluciones para cada intensidad de sequedad ocular e irritación”. “Éstos son problemas de personas que principalmente pasan mucho tiempo frente a pantallas”, avisa. En su farmacia, asesoran recordando a los pacientes que se deben aplicar los colirios con las manos limpias, siguiendo las indicaciones del especialista o farmacéutico y, de esta manera, evitar infecciones. “Cuando se utilizan lentes de contacto, todavía más deben asegurarse de mantener una buena higiene y únicamente utilizar colirios que estén diseñados para este fin”, apunta. También recomiendan que sigan una rutina de hidratación ocular, especialmente si tienen ojos secos o emplean lentes de contacto por largos períodos de tiempo. Aunque recomienden medidas higiénicas o algún producto, recuerdan “la importancia de acudir al especialista y realizar su revisión”. Alcaide lamenta que, según su experiencia, “la comunicación entre la farmacia y los especialistas no es mucha”. Ellos siguen unos protocolos y unas normativas en los que, si detectan algún problema serio, alguna patología, alguna infección que no puedan tratar, directamente indican medidas higiénicas y derivan al paciente al oftalmólogo. “Normalmente, si vemos algo serio, derivamos al paciente al oftalmólogo, pero no hay un seguimiento constante”, clama. Cree que, si trabajaran más de cerca con los oftalmólogos, podrían dar un mejor servicio, hacer un seguimiento más adecuado, ofrecer mejor atención a los pacientes y lograr una mayor adherencia al tratamiento. Sara Alcaide Técnica en farmacia desde el año 2018 “CON UNA BUENA RECOMENDACIÓN DE COLIRIOS O LÁGRIMAS ARTIFICIALES PODEMOS MEJORAR LA CALIDAD DE VIDA DEL PACIENTE”
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