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EL FARMACÉUTICO 12 Daniel Silvan (León) Daniel atiende con esmero día a día a los vecinos del municipio leonés de Camponaraya, “una botica muy cercana a la población y frecuentada por una clientela muy heterogénea, ya que está situada en pleno Camino de Santiago”. Farmacia transitada que trabaja por y para la ciudadanía, “está especializada en el servicio de nutrición. Ayudamos a muchos pacientes a controlar su peso y a tratar patologías relacionadas con afecciones digestivas o que se puedan mejorar con la alimentación”. Para ello cuenta con un equipo altamente cualificado y muy implicado en su labor que “no escatima ni en tiempo ni en energía en conseguir lo mejor para cualquier persona que entre en la farmacia”, asegura Daniel. La farmacia desempeña un papel crucial como primer punto de contacto con los pacientes: orienta, deriva, detecta fallos en la medicación, realiza seguimiento... ¿Qué no hace la farmacia? “Realmente somos un todoterreno”, sostiene el farmacéutico leonés antes de añadir que “además, contribuimos a reducir la carga en otros niveles del sistema sanitario, lo cual no siempre es correspondido por la Administración, más preocupada por el gasto”. La creciente burocracia y la demora en los trámites administrativos es una cuestión de la que se lamenta nuestro entrevistado. Aun así, la botica sale siempre fortalecida ante las adversidades: “Somos un gremio muy implicado en la prevención, de ahí las campañas de información, el control de parámetros, el seguimiento terapéutico y, en mi caso concreto, la promoción de la alimentación saludable”. Y es que, pese a que todo el mundo sabe que es mejor prevenir que curar, Daniel asevera que el paciente aún no está acostumbrado a los servicios de medicina preventiva. De ahí que sea un nicho por explorar, no solo por sus excelentes resultados en salud, sino porque podría suponer un ahorro de 2.272 millones de euros al sistema. Por todo ello, aboga por la remuneración de todos los servicios que supongan una mejora para la ciudadanía: “Estamos acostumbrados a acudir a la farmacia a por la medicación y a recibir un trato muy profesional de forma gratuita. Hay que hacer un esfuerzo por educar a la sociedad y poner en valor los conocimientos del farmacéutico para evitar que sean regalados”, considera. La sociedad está cambiando y la farmacia tiene que cambiar con la sociedad para ser sostenible. ¿Cuál es la clave del éxito con vistas al futuro? “Tenemos que adaptarnos a los cambios, diversificar, especializarnos y hacernos más competitivos en servicios”. Nuestro entrevistado apuesta por “salir de la zona de confort de la dispensación aportando un valor añadido que haga que nuestro servicio sea fundamental”. Por tanto: centrarse en servicios que aporten beneficios al ciudadano, mejorar en operatividad y en gestión de recursos. Daniel se despide de nosotros no sin antes anticiparnos la gran revolución que está experimentando el modelo de farmacia. En este sentido, “debemos aprovechar todas las herramientas a nuestro alcance para optimizar nuestro trabajo y aportar una mejor calidad asistencial”. Con todo, concluye, “la calidez de la mirada ante un buen consejo o unas palabras de ánimo, no tiene precio”. “HAY QUE PONER EN VALOR LOS CONOCIMIENTOS DEL FARMACÉUTICO PARA EVITAR QUE SEAN REGALADOS” ¿CÓMO HA EVOLUCIONADO EL PAPEL DEL FARMACÉUTICO? ¿HACIA DÓNDE SE DIRIGE LA FARMACIA COMO ESPACIO DE SALUD? EN ‘A PIE DE CALLE’, SIEMPRE EN CONTACTO DIRECTO CON LOS PROFESIONALES DEL SECTOR, BUSCAMOS RESPUESTAS A ÉSTAS Y OTRAS PREGUNTAS CLAVE. A pie de calle

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