| 54 farmacia asistencial nicos que aporten energía, como la jalea real y las vitaminas del grupo B. “Ya hemos tratado sofocos, que es la primera manifestación, el estado de ánimo, que es muy importante, y la energía. Apartir de aquí, dependiendo de cómo esté la mujer, complementos nutricionales como los omega 3, EPA y DHA, que estén bien formulados entre uno y tres gramos. ¿Para qué? Para bajar la in amación y para el cerebro y la vista”, re exiona. Y antioxidantes, “enbasealasmanifestacionesquevayateniendo la mujer, porque habría que ver cómo están sus huesos, si tiene artrosis, artritis u osteoporosis, cómo están sus mucosas. Hay un activo muy importante que es el omega 7, que es el espino amarillo. Lo mejor de todo es que tenemos un arsenal en farmacia imbatible”, se congratula. Arias, siempre que trata una sintomatología, realiza un análisis comparativo de lo que hay en farmacia, desde lomás económicoamarcas premium, y certi ca que “tenemos soluciones muy e caces en la farmacia”. Tampoco se olvida del síndrome genitourinario, donde encontramos la atro a vaginal, que va más allá de la sequedad. “Una cosa es tener sequedadyotracosaesatro a.Cuandoelepitelio vaginal ha adelgazado muchísimo y produce lo que se llama dispareunia, que son relaciones sexuales dolorosas, hay que actuar por vía oral con un omega 7, un omega 3 y por vía tópica. Tenemosproductosespecí cosparalasrelaciones sexualesycomplementosdermocosméticospara la sequedad externa e interna”, refrenda. En el síndrome genitourinario en la menopausia, hay que incluir las infecciones vaginales, “que se van amultiplicar”. El boticonsejo Lamenopausia no suele ocurrir de un día para otro, es un período donde poco a poco se llega al n de lamenstruación en lamujer. Irene González Orts, farmacéutica comunitaria en Campo de Mirra (Alicante) y responsable del proyecto Boticonsejos, nos menciona algunos consejos higiénico-dietéticos que se pueden dar desde laO cina de Farmacia: usar hidratantes vaginales (en el caso de que los necesite); realizar ejercicio físico, especialmente aeróbico (andar, natación o baile entre otros); evitar el consumo de bebidas estimulantes (como el té y el café) y de alcohol; no fumar, ya que puede adelantar el comienzo de la menopausia; llevar una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, lácteos y productos con vitamina D; mantenerse activa para fomentar la autoestima; ejercitar el suelo pélvico y utilizar lubricantes para la relación sexual; vestirse con capas para poder quitarlas en el caso de tener sofocos, y acudir a las revisiones ginecológicas. Remarca que existen multitud de productos en la farmacia para todos los síntomas que suelen aparecer durante este período de la vida de la mujer. Para poder escoger el adecuado, desde su punto de vista, “es muy importante escuchar bien a la paciente y ver cuáles son los síntomas que más le afectan y así poder escoger el que mejor se ajuste a ellos”. En esta etapa, ¿se deben cuidar especialmente los huesos porque, sin el escudo protector de los estrógenos, los huesos quedan más desprotegidos frente a caídas o traumatismos? Rati ca que este es uno de los grandes problemas en algunas mujeres durante la posmenopausia. Por ello, es primordial insistir enque las pacientes debende acudir a sus revisionesmédicas. Concluye que“así llevaránunbuen control y evitaremos muchos problemas futuros”. detallaqueella tieneartrosis, quenotienenada que ver con la osteoporosis, y que su artrosis “vade cabeza”desde que está enmenopausia. “Entonces, la mujer no tiene por qué saber esto, porque, de hecho, las farmacias a las que yo he formado lohanaprendidoconmigo”, asegura. El que, concomplementosnutricionales, puedas conseguir queunamujer duermay seencuentre bien, que no tenga un estado de ánimo por los suelos, a ella le parece muy potente. Se muestra a favor de la terapia hormonal sustitutiva, si bien, “para eso, tienes que tener unas características y tienes que tener a un buen ginecólogo que te haga un seguimiento, porque noestáexentaderiesgos”.Hayquebuscaraestos dos y“a un farmacéutico que te acompañe”. Dentro del arsenal terapéutico de la prescripciónque tiene la farmacia, Arias empezaríacon algo para los sofocos. Cita las iso avonas de soja. Dentro de ellas, “la genisteína, por supuesto, que es lamás activa”. No obstante, “esto está totalmente contraindicado si hay algún cáncer estrógeno dependiente, porque su mecanismo deacciónes comoel de los estrógenos. Noseune a los receptores alfa, que están en pecho y útero, peroseuneal restodereceptores”. Hayotros “dos activos indispensables en sofocos”, que son la cimicífuga racemosa y el extracto citoplasmático de polen. “Ya tenemos tres complementos nutricionales diferentes para los sofocos. Luego, nos iríamosal sistemanerviosocentral yaquí deberíamosteneralgoparaaumentar ladopamina, queseríatirosina,queesunaminoácido,paraaumentar laserotonina,quees loquehacequetuestadodeánimoestépor lossuelosyquenopuedas dormir. Aquí estaríamoshablandodel triptófano ymelatonina,aunqueéstaúltimanoesaceptada por todo elmundo, pues puede provocar pesadillas”, asevera. Unidos a estos aminoácidos, que son losprecursoresdeneurotransmisorespara el estado de ánimo, estarían los adaptógenos, como la rhodiola, y antidepresivos naturales, como el azafrán. Matiza que“deberíamos tener plantasansiolíticas, comolavalerianaolamelisa, que bien formuladas en su conjunto van a hacer que bajes revoluciones y que tu estadode ánimo esté óptimo y que concilies el sueño”. Arias manifiesta que otra cosa que ocurre con mucha facilidad es el síndrome de fatiga crónica, física ymental. En este caso, un Q10 le parece“absolutamente indispensable”para dar energía a las células. Y complementos vitamí-
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