| 74 monográfico La calva puede esperar con las nuevas fórmulas anticaída TRAS UN VERANO EN EL QUE LAS SUCESIVAS OLAS DE CALOR HAN PERJUDICADO SEVERAMENTE EL CABELLO, JUNTO A OTRAS PARTES DEL CUERPO, LLEGA EL OTOÑO Y LA PREOCUPACIÓN ESTACIONAL POR UNA PÉRDIDA MAYOR. MIENTRAS EL MERCADO DE PRODUCTOS ANTICAÍDA, BIEN CONOCIDO POR LA FIRMA IQVIA, MANTIENE SUS PROPUESTAS FARMACOLÓGICAS MÁS ARRAIGADAS Y ABRE LA PUERTA A OTRAS NUEVAS. de ellas en edad fértil y la mitad a partir de la menopausia. Coincide en la alopecia común la acción de los andrógenos sobre una base de predisposición genética. Avanza con despoblación capilar en las zonas frontotemporal y occipital. El debilitamiento de cabello produce un pelo velloso más fino, que conlleva pérdida total con el tiempo por aumento de dihidrotestosterona (DHT). Arsenal contra pérdidas La demanda de tratamientos contra la calvicie mantiene su vigor, al margen de algunas exigencias de advertencias para uno de los productos más conocidos. El 80% de los pacientes con tratamiento para la alopecia recibe minoxidil y finasterida. El primero fue aprobado en 1988 por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EEUU (FDA). Al ser una solución tópica al 2% comercializada Hasta un centenar se elevan los tipos conocidos de alopecia, ya sea por causas hormonales, genéticas, autoinmunes, ingesta de determinados fármacos, estilos de la alimentación, estrés o patologías desencadenantes, ya sean cutáneas o de otro tipo. En procesos que tienen en común la pérdida de densidad capilar que lleva a su ausencia, tanto de forma gradual como potencialmente acelerada. Según la Fundación Piel Sana, sección de la Academia Española de Dermatología yVenereología (AEDV), la calvicie común, o alopecia androgenética, supone la pérdida de cabellos generalmente en el varón por causas fisiológicas debidas al pasode los años, aunque tambiénen mujeres conmenor incidencia estadística. Mientras que esta alopecia afecta al 45% de los hombres, y al 90% cuando alcanzan o superan los 90 años, suele impactar en el 10% de las mujeres, con un 35%
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