Escuchar y aconsejar a todo tipo de clientela, desde la persona mayor que vive en el pueblo, que llega con su receta de la Seguridad Social, hasta el ruso que busca un tratamiento cosmético o nutricional muy sofisticado. Piedad del Río Nieto, farmacéutica en Farmacia Internacional 24 horas San Pedro Alcántara (Málaga), nos cuenta que en ella “el cliente es el rey”. “Siempre abiertos” y “la farmacia que tiene de todo” son las dos definiciones que reivindican en sus redes sociales, aunque añade también“la farmacia que sabe de todo”. Celebraron en mayo del 2018 su 60 aniversario. Se caracterizan por tener unstockmuycompleto, tantoenmedicamentos comoendermocosmética, medicina natural y nutrición. Disponen de una exposición muy amplia, porque los medicamentos se encuentran en su almacén, enel sótano, donde tienendos robots. El suyoes unpersonal altamente cualificado que habla varios idiomas. “Aquí no contratamos a nadie sin inglés.Mi padre, que fuequien fundó la farmacia, apostópor la formación en idiomas. Todos tenían clases de alemán, de francés, de inglés”, relata. El motivo es que hay mucha clientela extranjera. Reconoce que aún no han encontrado a un farmacéutico o auxiliar bien formado que además hable ruso. Precisamente, la clientela, junto con el horario de 24 horas, hace que el trabajo en su farmacia sea difícil y exigente.“Terminamos físicamente agotados. Intentamos dar buena formación y retos. Rara es la semana que no tienen formación. Prefieren hacerla en formato presencial y al mediodía. “Formaciones cortas, peromuchas”, matiza Del Río Nieto. 450 metros cuadrados para ventas Ésta es una de las farmacias más grandes de España. La planta que se dedica a las ventas, “casi todo es exposición, porque todos los medicamentos se encuentran en el sótano”, posee 450 metros cuadrados. El almacén, un poco menos. Se guarda mucho en robot para tener casi todo lo que tienen, “para que la gente realmente toque todo. Toque, mire, pruebe”. “Nuestra farmacia está basada enque tú te pasees por ella; veas, toques y pruebes”, insiste Piedad del Río. Afirma que Apotheka, empresa con la que han ido de la mano para su última reforma, se lo preparó fenomenal. Por cuestiones prácticas, han dividido la farmacia por áreas o temas, pero su idea es que se atienda y se aconseje a cualquier cliente, sin distinción de idioma o de lo que vaya a requerir, en cualquier zona y en cualquier caja. Subraya que el personal está muy especializado, pero que cualquier vendedor está formado para aconsejar sobre piel, homeopatía o medicamentos. Desdeel año1958, quees cuandoseabrió la farmacia, lahan reformado cincoveces. Hanvariadoel estilo, ladistribución, elmobiliarioyhasta la estructuraarquitectónica.“Sinpararnuncade trabajar, yestandosiempre abiertos, hasta hemos tirado el edificio y construido uno nuevo”, explica. Para estaúltima reforma, buscaronvarias empresas especializadas que “SIEMPRE ABIERTOS”Y “LA FARMACIA QUE TIENE DE TODO” SON LAS DOS DEFINICIONES QUE REIVINDICAN EN SUS REDES SOCIALES les plantearan propuestas y presupuestos muy innovadores e interesantes. El proyecto y el tipo de servicio y asesoramiento de Apotheka les hizo decidirse sin duda por ellos. “Estábamos para oír y estudiar las propuestas cuatro personas. Coincidimos en que había que elegir la de Apotheka”, señala. “Nos ofrecieronmuchomás que un proyecto de decoración. Nos hicieron un estudio de mercado y una reestructuración de la farmacia por zonas muy razonada, que nos encantó. Nos cambiaron la forma de la farmacia. Otra cosa que nos gustómucho fue que nos dieron unplanconfechasconcretas, contodoplanificado”, destacaDel RíoNieto. Adviertedeque su local eraunpoco“difícil”, por las columnas que tiene. Delmismomodo, les ofrecieronungranasesoramientopara la iluminación del local, la distribución, la nueva imagen de la fachada, etcétera. Buscaron ser competitivos en el precio. Teníamos muy claro que queríamos una farmaciamuy limpia, industrial, en la que el producto fuera el principal valor, por encima de la decoración. “Antes, intentábamos ordenarlo todo para que cupiera en las estanterías, pero llegó Apotheka y nos propuso algo que nunca nos habían dicho. Colocar el mostrador, la parte de farmacia, en el lugar más frío. Entrabas y tenías losmostradores
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