IMFarmacias_120

funciónbarrera,así comoañadirunextrade luminosidadehidratación”. En resumidascuentas, “activosqueconsolidanlasfuncionesdeladermis, tanto estructurales como de la red vascular”, subraya la especialista. Un reto para los científicos En relación a las texturas y nuevos formatos, Aramburu considera, asimismo, que “el consumidor es también cada vez más exigente”. Con lo cual, cree que “para el formulador es todo un reto crear texturas innovadoras”, sobre todoporque “sebusca sorprender al usuariode tal forma que el uso de nuestro cosmético sea, además, una experiencia capaz de transmitir una emocióndurante laaplicación”. Para ello, “se experimenta e innova con materias primas que se seleccionan minuciosamente, con perfiles sensoriales superiores y de la máxima calidad que el formulador deberá integrar en la formulación de forma magistral para un acabado perfecto”, explica la portavoz de Dermofarm. Poniendo en práctica lo expuesto anteriormente, el laboratorio está trabajando actualmente enuna innovación conmuchopotencial. Adelanta laHeadof Research, Development and InnovationdeDermofarm al respectoque “nuestraprincipal líneade investigaciónestá focalizadaal cuidadoy tratamientode laspielesmás sensibles y reactivas, esdecir, pieles con un umbral de tolerancia muy bajo”. Hace hincapié en que “una piel sensibletambiénnecesitalimpieza,hidratación, y, sobretodo, tratamientos que ayuden a fortalecer la barrera cutánea”. Por lo tanto, afirma, “lo abordamos tanto desde el punto de vista de los principiosactivoscomolosexcipientesde laformulación”. “Buscamos innovadorasmoléculasocombinacionesdeellas, que, bienpor sutamañoosus características estructurales, son ideales parael cuidadode las pielesmás sensibles”, añade. De lamisma forma, “tambiénreducimosyoptimizamos el uso de conservantes para preservar intacta lamicrobiota de la piel”. Es necesario, porque, como apunta, “hoy la piel se entiende como un complejísimo ecosistema, y no simplemente comouna barrera de defensa natural. Todoello impulsaunanuevaconcepciónde lapiel y, enconsecuencia, una forma innovadora de cuidarla”. Como formuladores, reflexiona por último Aramburu, “tenemos un gran retopor delanteque es, ante todo, dar respuestaa las necesidades del consumidor para mejorar su calidad de vida”. De esta forma, concluye, “intentamos aportar nuestro know-how, labrado tras muchos años de experienciaen la industriadermocosmética, para tratar deconseguir aquello que cumpla las expectativas del cliente”. Dermofarmcumpledesde1972 con lamisióny el compromiso social de fomentar entre los consumidores la salud y el cuidado de la piel. Por este motivo, el laboratorio situado en Barcelona no ha esperado a que la pandemia cambie la inercia en relación a la inversión en I+D+i en dermofarmacia; ya era una apuesta fuerte para la compañía antes de marzo de 2020. En concreto, cuenta Ainhoa Aramburu, Head of Research, Development and Innovation de Dermofarm, “nuestro nivel de inversión se ha mantenido alrededor del 2% de nuestra facturación”. Respecto al campo en el que se pone ahora más el foco en lo que a I+D+i en dermofarmacia se refiere, bajo su punto de vista, “se dirige a ofrecer una atención cada vez más cercana y especializada”. Esto se debe, manifiesta Aramburu, a que “estamos ante un consumidor cada vez más exigente, al que le preocupa la composición de los cosméticos, se interesa por sus ingredientes, su origen, y no quiere renunciar a las novedades en texturas”. La sostenibilidad, nuevo eje en la investigación Enotraspalabras, para laexperta, cosmeticidad, sostenibilidadyeficacia son los pilares fundamentales de la investigación y la innovación en Dermofarm. “La sensorialidadde los productos, laeficaciade estos, y cada vezmás la sostenibilidad, son los principales ejes enel desarrollodenuevos productos”, apunta. Eneste sentido, “tenemos el compromisode ser transparentes, todoslosresultadostienenqueestarcomprobadoscientíficamente para asegurar la eficacia y la seguridad. Ofrecer un producto de alto perfil sensorial ynoperder de vistael impactomedioambiental que ello implica”, afirmaAramburu.Y, almismotiempo, losostenibleestáganandoterreno, por lo que “nos dirigimos hacia productos cada vez más respetuosos con el medioambiente”. Por el contrario, según la especialista, hay una tendencia o apuesta muy fuerte de los principios activos ‘tradicionales’ o ‘clásicos’, como pueden ser el Retinol, la Vitamina C o el Ácido hialurónico. La razón de esta apuesta por lo ‘vintage’, según la Head of Research, Development and Innovation en Dermofarm es que también son “los activos con eficacia más que demostrada a lo largo de muchos años”. Además, agrega, sobre ellos “hay numerosos estudios y publicaciones que avalan sus beneficios para la piel”. Precisamente, entre los beneficios que aportan los principios activos del momento se encuentra el de ser un ingrediente eficaz para los productos contra el envejecimiento. Es por eso que, a día de hoy, los científicos deDermofarmestán trabajandoen formulaciones queaborden el tratamiento de las señales del paso del tiempo. En palabras de AinhoaAramburu, “sabemosqueel envejecimientocutáneoesunproceso continuo y complejo, en el que intervienen muchos mecanismos, donde se producen cambios morfológicos y funcionales en la piel”. Así pues, agrega, “los principios activos que utilizamos para nuestros productos, aportan siempre una mejora de las condiciones de la piel: son activos que reducen las arrugas y líneas de expresión; y ayudan en la síntesis del colágeno, una proteína que vamos perdiendo con la edad y que es fundamental para la elasticidad de la piel y combatir la flacidez”. De igual modo, son“principiosactivosquenosayudanareducirmanchas,mejorar la “ESTAMOS ANTE UN CONSUMIDOR CADA VEZ MÁS EXIGENTE, AL QUE LE PREOCUPA LA COMPOSICIÓN DE LOS COSMÉTICOS, SE INTERESA POR SUS INGREDIENTES Y SU ORIGEN, Y NO QUIERE RENUNCIAR A LAS NOVEDADES EN TEXTURAS” “HAY UNA TENDENCIA O APUESTA MUY FUERTE DE LOS PRINCIPIOS ACTIVOS TRADICIONALES O CLÁSICOS, COMO PUEDEN SER EL RETINOL, LA VITAMINA C O EL ÁCIDO HIALURÓNICO”

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=