Sin embargo, reflexiona Antoni Real Ramis, presidente del COFIB, “hemos demostrado que no es una situación aislada debido a la pandemia, sino que estamos preparados para asumir mucho más peso y funciones en el SNS. No es algo que venga de ahora, pero quizá haya llegado el momento de concretarlo con más servicios asistenciales y su integración en el sistema sanitario”. Presión asistencial Cuando se decretó el estado de alarma, los farmacéuticos se adaptaron desde el primer momento a la situación, y en muchas ocasiones se vieron obligados a crear protocolos de actuación, sin experiencia previa ni ayuda de las administraciones, para ofrecer un servicio seguro tanto para los ciudadanos como para ellos mismos, de una manera altruista. Además, numerosas iniciativas llevadas a cabo por las oficinas de farmacia han contribuido a reducir la presión sobre otros recursos sanitarios del sistema, aportando un apoyo imprescindible para evitar el colapso. “Dehecho”, recuerdael presidente, “anteel cierre de los PAC y centros sanitarios fuimos los centros dereferenciadurante losprimerosmesesyhemos seguido con nuestro servicio de forma habitual, compensando las dificultades que tenían los ciudadanos para acceder a los Centros de Salud. Además,durante losmomentosmáscríticosde la pandemia, conseguimosquesepudieranrenovar automáticamente las medicaciones de crónicos y gente más vulnerable, además de otras iniciativasquehanresultado fundamentalesparaque ningúnciudadano sequedara sin sumedicación ni atención farmacéutica”. Desde el COFIB se muestran convencidos de que la farmacia podría ayudar mucho más, tanto en la lucha contra el Covid-19 como en el propio funcionamiento del SNS a nivel general. “Nos hemos ofrecido para ayudar en todo lo posible y participar en las estrategias de cribado, prevención y detección precoz y cualquier otro servicio que pueda ser de ayuda para los ciudadanos”, manifiesta Real. Nuevas medidas Cuando le preguntamos al presidente acerca de su opinión sobre las medidas planteadas en el Plan de Medicamentos Biosimilares, manifiesta que todavía esmuy prontopara valorar en profundidad esta cuestión, ya que esperan conocer el texto final y poder evaluarlo. “Loque es seguroesqueel sector farmacéuticoy lapropia farmacia comunitaria deberían tener un papel más relevante en la toma de decisiones y, sobre todo, no ser siempre el sector sobre el que recaen todas lasmedidasdepresión”, afirmaconvencido. importantes es “saber adaptarnos a los nuevos tiempos y nuevas exigencias. Igualmente, potenciar la digitalización, tanto en el propio ColegiodeFarmacéuticoscomoen las farmacias comunitarias, permitirá dar el paso definitivo hacia una farmacia asistencial que realice un seguimiento personalizado y específico del tratamiento de los pacientes, al mismo tiempo que seguimos desarrollando nuevos sistemas como la interoperabilidad, la receta privada, CISMED, SEVEM...”. Los farmacéuticos de la comunidad balear han hecho un gran esfuerzo para desarrollar nuevos servicios, y luchan por consolidar una farmacia más asistencial y de más servicios a pesar de las circunstancias actuales, pero señalan que es imprescindible contar con el apoyo de la Administración. En ese sentido, desde el COFIB afirman que su prioridad debe ser la de tender puentes con la Administración Pública, para estudiar la mejor forma de integrar más su profesión dentro del SNS y potenciar la participación del farmacéutico en la salud del ciudadano, no solo en época de Covid, sino de forma permanente. “Debemos ser capacesde transmitir a lospolíticosque la intervencióndel farmacéutico conlleva una mejora de la calidad de vida y el seguimiento de los pacientes, y su implantación dentro del SNS supondría un importante ahorro dentro del sistema sanitario en cuanto a lamencionada descongestión de la Atención Primaria, visitas aurgencias, hospitalizaciones, interaccionesoproblemasderivadosde losmedicamentos, entreotrosbeneficios”, recuerda el presidente. Son muchos los frentes abiertos para el sector de las farmacias, y este periodo de crisis sanitaria sin duda ha sido crítico para el día a día de las y los profesionales a nivel laboral y tambiénpersonal. Por loque se refiere al plano legislativo, un tema candente es también la futura reforma de la Ley de Garantías y Uso Racional de los Medicamentos. A ese respecto, Ramis considera que igual que sucede con el tema de los genéricos y biosimilares, lo fundamental es analizar la cuestión con amplitud de miras, y plantear nuevasposibilidadesquenose limitenaponer el foco y la presión en las farmacias, conmedidas cortoplacistas y con muy poco recorrido. “Por nuestra parte, debemos ser capaces de demostrar los beneficios quepuede suponer, tanto para los pacientes como para el propio Sistema Nacional de Salud, la implantación de servicios asistenciales en las farmacias, además de otras medidas que puedan suponer mayores ventajas para el sector sanitario. Y para lograrlo, es imprescindibleque los farmacéuticos tengamos una participaciónmás activa en la formulación de la futura reformade laLeydeGarantías yUso Racional de los Medicamentos”. Necesidades Las farmacias de las Islas Baleares tienen una serie de necesidades y prioridades, algunas compartidas con el resto del estado, y otras propias derivadas de su realidad cotidiana. En palabras del presidente, enelmomentoactual y junto a la lógica preocupación derivada de la pandemia, una de las necesidades más “NOS HEMOS OFRECIDO PARA AYUDAR EN TODO LO POSIBLE Y PARTICIPAR EN LAS ESTRATEGIAS DE CRIBADO, PREVENCIÓN Y DETECCIÓN PRECOZ”
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