situaciones patológicas o disminuir su intensidad y/o su duración en caso de que se presenten. Hay diversos metaanálisis que corroboran diversos beneficios que los probióticos pueden aportar a las personas sanas, especialmente en periodos en los que previsiblemente puedan estar sometidos a alguno de los factores alterantes citados anteriormente. ¿Cuáles son los últimos avances en este ámbito? Posiblemente, el hecho de que se trate de personalizar las necesidades concretas de cada persona, dependiendo de su situación específica (rango de edad, lugar de residencia, situación laboral y emocional, época del año, actividad académica, actividad física, predisposición previa a ciertas infecciones, etc.). Para ello, se puede recurrir a distintas formulaciones de probióticos, prebióticos y antioxidantes, diseñados específicamente para subpoblaciones concretas y, en ese sentido, las distintas formulaciones que tienen como base el consorcio Lab4 pueden servir de buen ejemplo. Los estudios realizados con las cepas que forman el consorcio Lab4 (lactobacillus acidophilus CUL-60, lactobacillus acidophilus CUL-21, bifidobacterium CUL-20 y bifidobacterium animalis subsp. Lactis CUL-34) han mostrado beneficios para el equilibrio de la salud inmunitaria1. Estas especies de bacterias no patógenas y beneficiosas suelen estar presentes de forma natural en el intestino, pero su concentración puede verse reducida debido al estrés, a una alimentación inadecuada o a otros factores. Así, la suplementación con Lab4 puede ser de utilidad para ayudar a mantener una microbiota en buen estado y puede ser beneficiosa en personas adultas o niños que requieran modulación del sistema inmunitario1, que tengan infecciones de tracto respiratorio superior2 y personas que realizan actividades físicas de resistencia3. sino que puede formar parte de un estilo de vida saludable, para evitar esas situaciones o para que seanmás leves cuando se presenten. ¿Cuál es el papel principal de la microbiota en relación al sistema inmunitario? El principal papel de lamicrobiota en relación al sistema inmunitario es su “educación” y programación para que realice correctamente dos de sus principales funciones: (a) generar respuestas protectoras cuando se tiene contacto con patógenos, mediante susmecanismos de memoria; y (b) inducir una situación de inmunoregulación para que el sistema inmunitario no ataque a estructuras propias o a elementos inofensivos y relevantes para nuestra salud (componentes de la dieta, microbiota comensal). ¿Cómo afecta el estilo de vida “moderno” a la microbiota? El estilo de vida “moderno” cuenta con numerosos factores como son las dietas desequilibradas, el estrés permanente, las alteraciones del sueño y la actividad física insuficientes, entre otros, que contribuyen a la alteración de la microbiota humana y del sistema inmunitario, ambos fundamentales para nuestro desarrollo y salud, a corto y largo plazo. En este contexto, es recomendable tratar de modular las microbiotas alteradas de una forma beneficiosa para el hospedador con el empleo de probióticos y simbióticos (mezcla de probióticos y prebióticos). En el caso de la microbiota intestinal, un estilo de vida saludable favorece la función de barrera y la minimización de las respuestas inflamatorias, lo que permite una estabilidad de las comunidades microbianas, caracterizada por un predominio de las bacterias comensales o mutualistas. ¿Cómo avanza el consumo de probióticos en España? Los consumidores cada vez son más conscientes del estrecho vínculo entre nuestra microbiota y la salud, por lo que hay una demanda creciente. Paralelamente, tanto el personal sanitario como los propios consumidores también exigen de forma creciente la demostración de la eficacia de estos productos en ensayos clínicos y un correcto control de calidad que garantice una dosis eficaz durante toda su vida útil. ¿Por qué son importantes los probióticos para el sistema inmunitario? Existen algunas cepas probióticas que tienen capacidad de inducir respuestas por parte del sistema inmunitario del hospedador. Estas respuestas pueden ser, a grandes rasgos, antiinflamatorias, proinflamatorias o inmunoreguladoras. Dependiendo de la situación, se debe optar por la cepa más adecuada para cada caso. En relación concretamente con las personas sanas, lo que más interesa es la inducción de respuestas de inmunoregulación. ¿Qué beneficios aporta el consumo de probióticos en las personas sanas? ¿Hay estudios fehacientes que lo corroboran? Las respuestas de inmunoregulación que inducen algunos probióticos permiten atenuar el impacto de cualquier factor alterante (estrés, frío, calor, ejercicio excesivo, etapa inicial de una infección, etc.) para que no desemboque rápidamente en una inflamación excesiva. En ese sentido, podrían prevenir el desarrollo de algunas LA SUPLEMENTACIÓN CON LAB4 PUEDE SER DE UTILIDAD PARA AYUDAR A MANTENER UNA MICROBIOTA EN BUEN ESTADO EXISTEN ALGUNAS CEPAS PROBIÓTICAS QUE TIENEN CAPACIDAD DE INDUCIR RESPUESTAS POR PARTE DEL SISTEMA INMUNITARIO DEL HOSPEDADOR Referencias: 1 Hepburn NJ, et al. Probiotic supplement consumption alters cytokine production from peripheral blood mononuclear cells: a preliminary study using healthy individuals. Benef Microbes. 2013;4(4):313-7 2. Garaiova I, et al. Probiotics and vitamin C for the prevention of respiratory tract infections inchildrenattendingpreschool: a randomisedcontrolledpilot study. Eur J Clin Nutr. 2015;69(3):373-9. 3. Roberts JD, et al. An Exploratory Investigation of Endotoxin Levels inNovice LongDistanceTriathletes, and theEffects of aMulti-StrainProbiotic/Prebiotic, Antioxidant Intervention. Nutrients. 2016 Nov 17;8(11):733
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