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sido líderes europeos en ensayos clínicos contra el coronavirus y hemos trabajadodurocon laAdministraciónparaevitarproblemasdesuministro y mantener la actividad de ensayos de medicamentos no Covid ”. En nuestro país,“ las compañías farmacéuticas trabajarondesde el inicio con diligencia y coordinación con la Administración sanitaria, primero paraasegurar el suministroen losmomentosmás complicados ydespués para contribuir al esfuerzo global de investigación ”. Arnés piensa que debemos sentirnos orgullososde ser el primer país europeoenensayos contra el Covid-19 y no sólo de haber logrado mantener la investiga- ción clínica en el resto de los medicamentos, pese a las dificultades provocadas por lapandemia, sinodeque,“ en2020sehabatidoel récord de ensayos aprobados enEspaña ”. Desde Farmaindustria han hecho un esfuerzograndede coordinacióny colaboración con laAdministración sanitaria y asimismo en materia de comunicación, dada la demanda social sobre la respuesta que el sector estaba dando a la pandemia. Un hito histórico sin precedentes ¿Qué noticia vivida por la industria farmacéutica es la más importan- te de los últimos doce meses? El director general de Farmaindustria considera, sinceramente, que“ lomás importanteeneste terribleperíodo ha sido la colaboración que ha habido entre compañías farmacéuticas, comunidad científica y autoridades sanitarias y regulatorias para haber logradoque, enapenas nuevemeses después dedeclararse lapandemia, yahubieraunaprimeravacunaaprobada ”. De acuerdo con sus palabras, “ hasidounhitohistóricosinprecedentes, que sóloel tiemponospermitirá valorar ensumedida ”. Ratificaque“ éstees el caminoaseguir enadelante ”. Abordamos con Arnés las principales lecciones aprendidas de los últi- mos meses, sobre todo de la segunda y tercera ola del Covid-19, para el sector. “ Son varias. Una principal es la importancia de tener un buen sistemasanitario, biendotadoyadecuadamentefinanciado. Hemos visto igualmente lo importante que es invertir en I+D, en innovación, y cómo la colaboración público-privada nos ayuda a sermás rápidos y eficientes para encontrar soluciones. Y hemos visto con mayor claridad hasta qué punto lasaludy laeconomíayel bienestar están ligados y, por tanto, hasta qué punto el dinero que dedicamos a Sanidad y a medicamentos no es un gasto, sino una inversión, y muy rentable, por su impacto positivo en lo sanitario, lo social y lo económico ”, reflexiona. Del mismo modo, “ hemos aprendido que dependemos demasiado de países como China e India, por la gran cantidad de principios activos y medicamentos, además de productos sanitarios, que se producen allí; sobre todomedicamentos esenciales, que sonveteranos, yasinprotección industrial, por lo que sus precios son muy bajos, pero que siguen siendo muy valiosos para síntomas y patologías muy comunes ”. Defiende que tenemos que recuperar para España y Europapartede esaproducción, “quenospermitirámayorprotecciónante futurascrisis sanitariasy reforza- ránuestro tejido industrial ”. Desde Farmaindustria, hanpresentado ya al Ministeriode Industriaunproyecto inversor eneste sentido. Puntualiza que “ es una necesidad y una oportunidad para España ”. ¿Cuáles son las iniciativas que se han llevado a cabo durante la pande- mia, y que afectan a los medicamentos innovadores, que han venido para quedarse? Arnés contesta que, quizá, lo más crucial ha sido la constatación del valor de la colaboración público-privada en materia de investigación biomédica. “ Hace tiempo que la investigación de me- dicamentos es cadavezmás abierta, colaborativae internacional, pero la crisis lohamostradoal conjuntode lasociedad ”, sostiene. Las compañías farmacéuticas cooperan con universidades, hospitales y pequeñas compañías y grupos de investigación públicos y privados en todo el mundo para lograr nuevas soluciones para los pacientes, acelerar los procesos y ganar tiempo, lo que se traduce en salvar vidas. Se trata de encontrar el conocimiento allí donde esté y poner la experiencia, la capacidad coordinadora y los recursos económicos de la industria farmacéutica para que ningúnpotencial medicamento se quede en el camino simplementepor faltade los recursos científicos y la capacidad inversora necesarios para asumir el alto riesgo del desarrollo. Dos de las grandes líneas de trabajo de Far- maindustria son producción e investigación. En la primera, ya han presentado al Gobier- no el proyecto Medicamentos Esenciales y Capacidades Industriales Estratégicas para la cadena de valor de la Industria Farmacéutica Innovadora en España (MedEst) ,“ para reforzar la producción en España demedicamentos es- tratégicos, respondiendo a una necesidad real, dado que buena parte de estosmedicamentos han pasado a producirse principalmente en países asiáticos, y con el fin de aprovechar nuestra capacidad para recuperar parte de esa producción, reforzar nuestro tejido pro- ductivo y dar a nuestro país mayor protección estratégica ”. En cuanto a investigación, pretenden “ apro- vechar nuestra condición de referencia interna- cional en investigaciónclínicademedicamentos y el empuje a la biomedicina en todo el mundo para dar un paso adelante y convertir a nuestro país en un polo internacional de inversión en investigaciónbiomédica ”. En ambos casos,“ ha- blamos de necesidades reales y de verdaderas oportunidades parael futurode España, puesto que partimos de posiciones ventajosas con respecto a otros países de nuestro entorno ”. Tres grandes compromisos Humberto Arnés explica que, desde la irrupción de la pandemia, hay tres grandes compromisos que las compañías farmacéuticas están cumpliendo con los pacientes. “ El primero fue volcarnos en el hallazgo cuanto antes de un tratamiento eficaz contra el Covid-19 ”, detalla. Se logró que en menos de un año dispusiéramos ya de varias vacunas eficaces y seguras, “ y España ha contribuido a este esfuerzo global ”. El segundo fue“ asegurarquenoseprodujeranproblemasdesuministrodemedicamentos para ninguna patología, es decir, que ningún paciente se quedara sin sumedicamento ”. Esto fue un reto de una responsabilidad enorme. Hay que tener en cuenta que en España hay 25 millones de personas que toman al menos un medicamento cada día para tener controlada su enfermedad. A esta magnitud hubo que sumarle los medicamentos específicos que fueron, y son, necesarios para tratar a los enfermos de coronavirus en las UCI de los hospitales españoles. Hoy, transcurridos ya más de 16 meses desde el comienzo de esta crisis, “ podemos decir que no hemos sufrido problemas relevantes de desabastecimiento ”. El último compromiso tiene que ver con otro asunto de suma importancia para los pacientes: “ Los ensayos clínicos que estaban en marcha en nuestros hospitales cuando estalló la pandemia y que fueron interrumpidos por el colapso en los hospitales y las medidas de confinamiento ”. En este caso, con la estrecha colaboración con la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, se consiguió normalizar la situación con rapidez. Tanto es así que 2020 terminó con una cifra récord de ensayos clínicos aprobados en España, superando los 1.000 ensayos.