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el farmacéutico | 12 Tomás Parra (Ceuta) Tomás cogió el testigo de su padre en 2016 cuando se puso al frente junto a su hermano Luis de la farmacia familiar. Con gran entusias- mo nos cuenta cómo han sido sus primeros años. “Comencé a trabajar en la oficina de farmacia como farmacéutico y nutricionista. Sin duda, lo que más me satisface es poder ayudar a mis pacientes, ver cómo mejoran su salud y cómome consideran una persona de con anza en la que poder apoyarse”. La farmacia de herencia familiar aún conserva su esencia. De hecho, el olor a tradición toda- vía impregna sus paredes, pero también es una botica moderna ubicada en el centro de la ciudad. “Desdequemi padreabrió la farmacia eranmuchos los domingos quemi hermanoLuis y yo veníamos a ordenar el almacén y me con- taba en qué consistía su trabajo, fue entonces cuando supe quemi aspiración era poder llegar a ser farmacéutico”. Situada en una zona comercial, tiene una clientela muy variada que va desde las personas que viven en las barriadas cercanas, hasta extranjeros que van o llegan a Ceuta a través de su conexión marítima. “Vendemos sobre todo medicamentos. Aunque es cierto que estamos muy centrados en los servicios complementarios, porque es lo que realmente nos diferencia de otras o cinas de farmacia”. Por supuesto éstos deben ser remunerados por parte del sis- tema de salud. “Hay estudios que demuestran que la atención asistencial en la farmacia genera un ahorro de los gastos anuales de hospitalización en España, por tanto, es importante valorar la opción de remunerar estos servicios sabiendo que, primero, aportan bene cios a la saludde los pacientes, y, segundo, disminuyen los gastos de sanidad”. Precisamente por ahí van los tiros de la far- macia del futuro. “Actualmente las farmacias ofrecenmás servicios asistenciales quemejoran la salud y facilitan la vida de nuestros pacientes. Dehecho, ese cambio lohemos vividoennuestra propia farmaciaofreciendonumerosos servicios como detección de glucosa, colesterol y triglicé- ridos, análisis capilar, sistema de dosi cación personalizado y servicio de nutrición”. Tomás y su hermano Luis han sido los prota- gonistas de ese cambio. ¿Con qué nalidad? Reivindicar el papel esencial de servicio pú- blico que desempeña la botica. “Los recortes no nos gustan a nadie, y más cuando te tocan de cerca. Son muchos los medicamentos que mensualmente siguenbajando los precios, y, ob- viamente, es unaperdidaque se nota”, advierte, y añade: “Sin embargo, en Ceuta dependemos directamente del gobierno al ser una ciudad autónoma, y no tenemos problemas con los pagos de las aportaciones de las recetas”. Para asegurar la sostenibilidad del modelo a largoplazo son fundamentales dos elementos: formación e investigación. “Debemos ofrecer a los pacientes una cierta garantía en la dispensa- cióndelamedicación,yparaelloesindispensable una buena formación. También la investigación en el mundo farmacéutico es permanente, sobre nuevosprincipiosactivos, nuevosmedicamentos y muchos productos de parafarmacia”. Todo ello conjugado con la integración de la tecnología y de los grandes avances digitales. “La farmacia va seguir evolucionando cada vez más rápido mediante robots que facilitan el trabajo, servicios quemejoran la saludde los pa- cientes y laespecializaciónde los farmacéuticos”. Elena Grande (Córdoba) Nos acercamos hasta el centro de la capital cor- dobesa para conocer una de las boticas más antiguas de la ciudad. Desde que su abuelo decidieraabrirlaen1935, varioshan recogidoel testigo de una profesión que se ha convertido en una auténtica historia familiar. En la entrada de su oficina de farmacia de Bujalance nos recibe Elena. “Llevo más de 13 años ejerciendo como farmacéuticaadjunta en la farmaciademi padre, FernandoGrande Gónzalez de Canales en el centro de Córdoba capital, mi abuelo Enrique fue el primer titular abriéndola en 1935, y desde hace poco más de 2 años ejerzo como titular de una farmacia en Bujalance, de donde era mi abuela paterna”. El municipio situado en la campiña cordobesa ofrece un paisaje único y espectacular. Desde aquí Elena atiende a diario a los vecinos del pueblo. “ Se trata de una farmacia rural donde el volumende recetas de seguridad social esmayor quelaparafarmacia,hacemosguardiasenturnos rotatorios con lasotrasdos farmaciasdel pueblo”. Con un perfil de cliente heterogéneo, a su farmacia acuden desde recién nacidos hasta personas de la tercera edad. “ El ambiente es muyagradableycordial,lesgustanquelesdemos un consejo farmacéutico experto para todas sus dudas, las pautas de posología o las posibles interacciones en sumedicación”. Por tanto, la atención farmacéutica es funda- mental ¿esasí? “Exacto,eslalabormásimportan- te que realizamos los farmacéuticos, sobre todo los boticarios rurales ya que podemos ayudar al paciente a una mejor adherencia al tratamiento gracias al acceso fácil y uido que tenemos a los médicos de atención primaria”. Yestoesposible, también, por la formacióncua- li caday lapreparaciónprofesional queposeen los farmacéuticos actuales.“ Hevistoevolucionar la farmacia hacia una mayor profesionalización con la formación de sus titulares presentes en las redes sociales, ofreciendounabanicode servicios novedosocomodietética,nutriciónoespecialistas endermofarmacia”. Claro está, todo ello sinper- derdevista laesenciadelmodelomediterráneo en la cual el binomio titularidad propiedad garantiza dos cosas muy importantes: la total independencia como profesionales sanitarios, y lacapilaridaddel sistema.“ Poderaccederauna farmacia es poder acceder a la salud”, sentencia Elena. Qué duda cabe que la farmacia tiene un gran futuro por delante.“ Todos queremos vivir más y “La atención farmacéutica genera un ahorro de los gastos anuales de hospitalización en España”

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