Una farmacia sevillana, el primer establecimiento sanitario autosuficiente energéticamente

En Mairena del Aljarafe (Sevilla), Sanafarmacia, una farmacia de la localidad ha incorporado a su cartera de servicios los conceptos “bio” y “eco”. Según su titular, Francisco Galán Miró, la idea es “subrayar un compromiso radical con la salud de los pacientes y del entorno”. Para ello, ha iniciado una serie de perforaciones a 150 metros de profundidad para extraer energía del subsuelo y convertirse, así, en el primer establecimiento sanitario autosuficiente energéticamente. “Nuestro objetivo es extraer de la tierra toda la energía que necesitamos para climatizar la farmacia sin consumir ni un solo kilovatio de la red”, explica Galán, convencido de que la importante inversión que está acometiendo tendrá un “retorno medioambiental para el entorno y un retorno económico para la propia oficina de farmacia, pues entre 6 y 8 años esperamos recuperar, gracias al ahorro en consumo y costes eléctricos, el importe total de lo invertido”.

De hecho, considera que la combinación de esta forma de alimentación energética con la instalación de un suelo radiante, “nos garantizará la máxima eficiencia energética”. Fundamentalmente porque su objetivo es convertir su oficina de farmacia en el primer establecimiento sanitario descontaminado electromagnéticamente. Entre otras medidas, gracias al sistema de apantallamiento de sus muros y ventanas que protege a los usuarios de las radiaciones. Para ello, ha recabado la colaboración de la Fundación para la Salud Geoambiental, que lo está asesorando en todas las actuaciones. De esta manera, la oficina de farmacia sevillana dispone de teléfonos inalámbricos que funcionan con una base libre de radiaciones cuando no hay comunicación. Igualmente, los tradicionales arcos anti-hurtos han sido sustituidos por un sistema menos contaminante electromagnéticamente, y los materiales de construcción, mobiliario y decoración están desprovistos completamente de sustancias tóxicas. Asimismo, el propio interiorismo y la ordenación de las estructuras y los espacios se han realizado teniendo en cuenta las geopatías (radiaciones electromagnéticas que emanan de la Tierra y que pueden afectar a la salud física o psíquica de las personas, animales y plantas), para evitar la contaminación geológica.

La descontaminación electromagnética es uno de los campos en los que se proyecta el compromiso ambiental de esta oficina de farmacia. Asimismo, la orientación ecológica afecta a detalles como el aparcabicicletas junto a la entrada del establecimiento, con el que se quiere fomentar la movilidad sostenible o el acuario marino de arrecife que el titular instaló. Los planes futuros e inmediatos de Galán pasan, también, por instalar un jardín vertical que ocupará casi todo el perímetro de su fachada. “Un metro cuadrado de cobertura vegetal genera el oxígeno requerido por una persona en todo el año y atrapa 130 gramos de polvo por año”, explica el titular de Sanafarmacia, que subraya que los jardines verticales ayudan a filtrar los gases nocivos y a atrapar y procesar kilos de metales pesados.