Tiene sentido hacer desde la farmacia intervenciones conjuntas de la rinitis y del asma

La rinitis y el asma son dos patologías de la vía respiratoria, con manifestaciones de un mismo mecanismo fisiopatológico que conduce a la inflamación crónica de la vía respiratoria. Es primordial conseguir una comunicación eficaz con el paciente que demanda descongestivo para evitar su sobreuso.

04/03/2025

La Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) organizó este martes en Madrid una Jornada científico-profesional. En ella, Navidad Sánchez Marcos, farmacéutica comunitaria en San Sebastián de los Reyes (Madrid), del Grupo de Trabajo de Respiratorio y Tabaquismo de SEFAC y vicepresidenta 3ª de SEFAC, trató el tema ...

La Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) organizó este martes en Madrid una Jornada científico-profesional. En ella, Navidad Sánchez Marcos, farmacéutica comunitaria en San Sebastián de los Reyes (Madrid), del Grupo de Trabajo de Respiratorio y Tabaquismo de SEFAC y vicepresidenta 3ª de SEFAC, trató el tema de los protocolos de actuación en rinitis SEFAC-SEMERGEN y el abordaje de la vía respiratoria única y su conexión con el asma.

"La rinitis es un proceso inflamatorio de la fosa nasal con síntomas como rinorrea, estornudos, congestión nasal y picor de la nariz. No han de darse todos los síntomas. El asma es una enfermedad inflamatoria crónica de las vías respiratorias que cursa con hiperrespuesta bronquial y obstrucción variable al flujo aéreo total o parcialmente reversible. Hay que tratarlo con antiinflamatorios", comentó. Sus síntomas más frecuentes son sibilancias, tos y disnea. Su clasificación es bien controlado, parcialmente controlado y mal controlado. Éstas son dos patologías de la vía respiratoria, con manifestaciones de un mismo mecanismo fisiopatológico que conduce a la inflamación crónica de la vía respiratoria. Tiene sentido hacer intervenciones conjuntas desde la farmacia mediante indicación farmacéutica, dispensación (pacientes diagnosticados y con tratamiento prescrito) y seguimiento.

Recordó que muchos de los pacientes con rinitis reducen sus síntomas desde la farmacia. La rinitis alérgica es la que más va allegar a la farmacia. Las rinitis intermitentes son las que no duran más de cuatro días y menos de un mes, mientras que la persistente es la que hay síntomas durante más de cuatro días a la semana y más de un mes. Habló también de las rinitis no alérgicas, como la rinitis inducida por medicamentos. Hay que garantizar que el paciente ha de entender que no ha de usar el descongestivo nasal más de tres o cuatro días. Los farmacéuticos han de insistir en los lavados nasales.

Respecto a coexistencia con otras patologías, la rinitis puede coexistir con otras afecciones respiratorias, como la sinusitis o la otitis. En el caso del asma, la coexistencia se observa entre un 15-38 %. Hay que profundizar en los síntomas para lograr un buen control. El diagnóstico de asma se hará siempre con una espirometría con prueba broncodilatadora. Hay un uso excesivo de SABA. Hay que incidir en las comorbilidades, en la técnica inhalatoria y en el plan de acción del paciente.

¿Qué se puede recomendar? Para la rinorrea, corticoide nasal o antihistamínico oral. Para el estornudo, corticoide oral o antihistamínico oral. Para picor nasal, antihistamínico oral o corticoide nasal. Para obstrucción nasal, corticoide nasal o descongestivo nasal. Para sítomas oculares, antihistamínico tópico ocular o antihistamínico oral. Sánchez Marcos remarcó que es primordial conseguir una comunicación eficaz con el paciente que demanda descongestivo. "La realidad es que muchos de los pacientes que acuden a la farmacia se van sin un producto, pero sí con un consejo. Ante el sobreuso de descongestivos, intervengamos", propuso. En estas dos patologías, se aconsejará evitar los alérgenos, realizar lavados frecuentes con agua de mar o soluciones salinas fisiológicas, realizar vahos y utilizar pomadas intranasales hidratantes, mantener una alimentación adecuada, moderar la ingesta del alcohol que es deshidratante, extremar las condiciones higiénicas en el hogar, evitar el consumo de tabaco y la exposición a su humo, evitar otros contaminantes, evitar cambios bruscos de temperatura, no permanecer en lugares cerrados o mal ventilados y evitar el contacto con perfumes y olores fuertes.

Autor: IM Farmacias