Cinfa financia varios proyectos inclusivos para personas con enfermedades raras, TEA y daño cerebral

La edición número 13 del `Teaming´ de Cinfa ha avanzado durante los últimos meses mediante la colaboración con otros cinco proyectos sociosanitarios elegidos por las personas de la empresa que forman parte de esta filosofía. Así, el laboratorio ha aportado a cada uno 3.500 euros, reunidos por sus profesionales y por la propia empresa. Estas ayudas han servido para impulsar el trabajo de Mundubat y Sunu Buga Buga, entidades enfocadas en mejorar la situación de la población de Palestina y de Gambia, respectivamente; han apoyado la investigación de una enfermedad rara mediante el apoyo a la Asociación `Gabriella, mi pequeña guerrera´; y han financiado programas de ADACEN y ANAIF, asociaciones navarras que trabajan con personas con Daño Cerebral y jóvenes con TEA.

En primer lugar, gracias a la ayuda de los `cinfateamers´, se ha llevado a cabo una acción de ayuda a la población de la franja de Gaza que está sufriendo las graves consecuencias del conflicto armado en esta zona. El proyecto, denominado "Solidaridad con Palestina", está liderado por la organización Mundubat, que trabaja en Palestina desde 1998 defendiendo los derechos de la población y por la consecución de una paz justa en la región.

"Tras meses de conflicto en la franja de Gaza, los alimentos y el agua escasean y se están dando graves cuadros de desnutrición entre la población. Más de 25.000 personas agricultoras y pescadoras han perdido sus cosechas o no pueden salir a pescar; más de 15.000 criadores de ovejas o vacas han perdido sus animales, y esto implica graves situaciones y carencias alimentarias globales", explican desde la ONG.

Con la ayuda donada por los ´cinfateamers´, en un primer momento se ha podido brindar cobertura a las necesidades básicas de supervivencia de los afectados mediante alimentos, agua y cobijo. Asimismo, se van a iniciar acciones para restablecer la producción agraria y pesquera mediante la rehabilitación de invernaderos y la reparación de infraestructuras de pesca, de modo que se recupere, al menos, una parte de la capacidad de producir alimentos.

Ana Esther Gutiérrez, del departamento de Desarrollo Analítico de Cinfa, fue impulsora de este proyecto, y dice estar "profundamente agradecida a todos los compañeros y compañeras que lo votaron, porque muestra un enorme grado de solidaridad y una sensibilidad extraordinaria con las personas de Palestina".

El siguiente proyecto del `CinfaTeaming´ también atraviesa fronteras y llega hasta África. "Desayunamos 6 meses", de la ONG Sunu Buga Buga ha permitido dar desayunos a 170 estudiantes de un colegio de este pequeño país africado durante medio año. Gracias a esta acción, estos niños y niñas han podido tomar frutas frescas y variadas y un producto lácteo natural, algo casi inexistente anteriormente en su dieta cotidiana. 

Esta ONG de cooperación al desarrollo, que busca reforzar la autoestima y la educación de la población local del país africano, surgió en 2009 de la mano de Verónica Hormaechea, natural de Bilbao, quien explica que "el Sunu Buga Buga ayuda a cubrir las necesidades básicas de las familias y miembros que lo forman, desde la población infantil hasta la anciana, todas ellas personas con muy bajos ingresos, que viven en estado de extrema pobreza. Es totalmente gratuito y trabajamos todos juntos distintos aspectos como el sanitario (contamos con un botiquín), el educativo (funcionamos como colegio, con ciclo infantil y primaria) el socioeconómico o el psicológico (ofrecemos un servicio de asistencia social a la comunidad)".

Por su parte,  Ana Abaitua, del departamento de Innovative Medicines Unit (IMU) de Cinfa, es una gran conocedora de la labor de esta ONG y de sus orígenes, como ella misma cuenta: "Vero tenía una "vida normal", según los estándares del mundo desarrollado: estudió una carrera, estaba trabajando, tenía amistades, familia, etc. En unas vacaciones en África, se dio cuenta de que con todo lo que sabía, podía ayudar a una comunidad del país a salir poco a poco de la extrema pobreza. Ella salió totalmente de su "zona confort" y entró en terreno desconocido. "Creo que es positivo que, con nuestra pequeña aportación, tengamos un poco de esa Vero en cada uno de nosotros y nosotras". 

Una entre un millón y nuevos programas de entidades navarras

Otro de los proyectos atendidos en los últimos meses es el de la asociación "Gabriella, mi pequeña guerrera", nacida de la fuerza de unos padres con una hija diagnosticada de una enfermedad degenerativa y ultrarara llamada BPAN (Neurodegereneración Asociada a la Proteína Beta-Hélice) y que afecta a una persona entre un millón. Se caracteriza por retraso en el desarrollo motor y cognitivo, espasticidad muscular, convulsiones, problemas de comportamiento y deterioro cognitivo progresivo.

El propósito de estos padres y por el que crearon esta asociación es dar visibilidad a la realidad que viven y, sobre todo, recaudar fondos para investigar sobre la enfermedad. Como cuenta María, madre de la pequeña, "esta es una enfermedad para la que actualmente no existe cura ni tratamiento, pero vemos una puerta a la esperanza gracias a un proyecto de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, que busca encontrar un tratamiento que la frene o cronifique".

La ayuda reunida por los `teamers´ de Cinfa se ha invertido en este trabajo de investigación y supone, según María y su pareja, "una ayuda muy importante. Recaudar fondos para la investigación de este tipo de enfermedades resulta muy costoso para asociaciones pequeñas como la nuestra y, por eso, valoramos tanto que nos hayan elegido para atender las necesidades de Gabriella y seguir trabajando por ella".

Por su parte, Pilar Rosales, delegada comercial de Visita Médica de la compañía, se muestra igualmente feliz y agradecida a todas las personas que han hecho posible este proyecto, ya que "significa mucho para Gabriella y su familia, quienes son un ejemplo de la lucha incansable en la búsqueda de tratamientos para poder paralizar el avance de esta enfermedad".

Los `cinfateamers´ también han hecho posible la financiación de la iniciativa "Un viaje hacia la inclusión. Vacaciones adaptadas para personas con Daño Cerebral", de la Asociación de Daño Cerebral de Navarra (ADACEN).

El Daño Cerebral Adquirido (DCA) es una lesión que sobreviene de forma repentina como consecuencia de un ictus o de un accidente craneoencefálico y que irrumpe de forma súbita y agresiva en la vida de las personas. Las consecuencias del DCA suponen cambios profundos tanto para la vida de la persona que ha sufrido el daño cerebral como para su familia y su entorno.

El proyecto abordado por los `teamers´ consiste en la organización de programas de vacaciones adaptados a las necesidades de personas con DCA, que les permitan disfrutar de un tiempo de ocio al tiempo que facilitan un descanso a sus cuidadores y familiares. Desde ADACEN, Andrés Ilundáin, gerente de la entidad, expresa su agradecimiento por esta colaboración, "no sólo por los recursos económicos que permiten llevar a cabo la actividad con un coste razonable para los usuarios, sino porque, con acciones como ésta, se visibiliza esta realidad y se fomenta la concienciación".

María Caballero, responsable de Departamento Médico y Desarrollo Clínico de Cinfa, es la promotora de este proyecto en la empresa, y recuerda que "todos podemos tener algún familiar o conocido que haya sufrido un ictus, un accidente de coche, o enfermedades como la esclerosis múltiple. Ninguno estamos exentos de que esto nos ocurra. La elección de este proyecto supone que las personas de Cinfa han empatizado con estos pacientes y sus familias". 

El último proyecto apoyado en esta ocasión por el `CinfaTeaming´ se denomina "Lucha por la igualdad de oportunidades para jóvenes con TEA", y está impulsado por la Asociación Navarra de Apoyo a la Infancia y la Familia (ANAIF). Regina Laquidáin, gerente de la entidad, explica que "los cerebros de las personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA) funcionan de modo diferente a lo que la sociedad entiende como `normal´ o `neurotípico´ y, por ello, les cuesta mucho encajar y tener una vida académica, social y profesional satisfactoria. Las personas afectadas por estos trastornos no tienen las mismas oportunidades que las demás a la hora de enfrentarse a los retos de la vida, ni en su infancia, ni en su adolescencia, ni en la edad adulta".

ANAIF trabaja desde 2016 para apoyar a este colectivo a lo largo de su ciclo vital, mejorar su calidad de vida y facilitar su integración en la sociedad. Uno de los programas que permite preparar a estos jóvenes para acceder al mercado laboral es el "Campo de trabajo", cuya realización ha sido posible gracias a la ayuda de los ´teamers´ de Cinfa. Diez jóvenes participaron en esta actividad, que se llevó a cabo durante una semana en el alberge de la localidad navarra de Eulate. Allí, recibieron orientación laboral y trabajaron habilidades sociales y emocionales para afrontar entrevistas de trabajo, así como habilidades cognitivas para realizar pruebas psicotécnicas. Al mismo tiempo, han participado en diversos talleres profesionales (carpintería, pintura, electricidad y cocina), con el fin de facilitar su acceso al mercado laboral. 

Como explican desde ANAIF, esta donación va más allá de lo material, "pues representa un compromiso con la inclusión, la empatía y el bienestar de quienes más lo necesitan. Ha supuesto un apoyo moral para estos jóvenes, al recordarles que no están solos en esta causa y que hay personas y empresas dispuestas a apoyar su labor para construir una sociedad más inclusiva y solidaria", afirman. 

Álvaro Crespo, del departamento de IT de Cinfa, agradece a sus compañeros y compañeras el apoyo a este proyecto que, "más allá de la ayuda económica, da visibilidad a la realidad de las personas con neurodiversidad. La sensibilización social es el primer paso para que logren lo que, al fin y al cabo, deseamos todas las personas: disfrutar de una vida plena".