Congreso SEFAC: "Somos una profesión científica y deberíamos ser especialistas"

Suscitó bastante interés en el XI Congreso Nacional de Farmacéuticos Comunitarios, de SEFAC, en Las Palmas de Gran Canaria, este viernes, el debate profesional Farmacéutico comunitario: ¿quo vadis?, con la moderación de Vicente J. Baixauli, presidente de SEFAC. "Lo hemos querido plantear porque hay una serie de temas que incluye el ´a dónde vas´, porque somos de la opinión de que las cosas hay que propiciarlas. Y son temas que o no interesan que se hablen o que tienen cierta complejidad, que modifican aspectos del modelo y que son polémicos", deliberó. Sopesó que es necesario tener elementos para tomar mejores decisiones, que los farmacéuticos han de estar informados. El objetivo de la mesa fue tener una idea de los temas de los que hay que hablar. En concreto: informar de la especialidad en Farmacia Comunitaria, comentar la propuesta de un modelo de Carrera Profesional, debatir sobre el Desarrollo Profesional del Farmacéutico Comunitario y presentar la propuesta de Recertificación de SEFAC.

Baixauli dibujó el marco del desarrollo profesional continuo, incluido el de la especialidad. Lo más reciente es lo que se llama recertificación, para que los pacientes tengan "una garantía" de que el profesional sanitario mantiene las competencias a lo largo del tiempo. La velocidad de los avances "obligan" a que estén formados. Aún, el Ministerio de Sanidad no ha regulado cómo lo va a hacer. La recertificación está ahí, pero por ahora se ha puesto en marcha de una forma voluntaria.

Ana Molinero, vicepresidenta 1ª de SEFAC, primero se encargó de la especialidad. "Como profesión tenemos que saber hasta dónde podemos llegar", comenzó. SEFAC pidió la especialidad de farmacéutico comunitario en 2013. "Estamos igual. Somos una profesión científica y deberíamos ser especialistas como el resto de nuestro entorno. Tenemos que actualizarnos constantemente", defendió. Se necesita esa formación. Se propuso tres años de formación y un acceso vía FIR. "Si tengo las competencias definidas, las podré hacer", afirmó. La financiación sería autofinanciada. Se rotaría también por farmacia hospitalaria y de Atención Primaria.

"El ser especialista o no es una decisión de los farmacéuticos, no de los estudiantes", matizó Baixauli. Por eso han de opinar los farmacéuticos comunitarios. Para Carmen María Preciado Brion, vicepresidenta de la Federación de Farmacéuticos No Empresarios (FEFANE), esto es necesario y no hay otro camino que la especialidad. "Habrá que ver de qué manera se llega", expuso. Carlos Gallinal, secretario general de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), declaró que, desde su organización, están muy preocupados por dónde va el futuro. "La especialidad es algo que hay que mirar despacio, pero eso no significa lento. En ese sentido, en los debates que hemos tenido, la Confederación de Decanos se ha puesto en contra. Ellos argumentan que los licenciados están habilitados perfectamente para trabajar en farmacia comunitaria. Apuestan por el modelo de máster. No sé hasta qué punto con ese modelo se puede ser especialista", reflexionó. Lo que les genera dudas es que el acceso a la especialidad sea vía FIR. "De primeras, suena muy bien. Lo que pasa es que, cuando uno accede a un FIR, busca una plaza de empleo público. ¿Queremos cambiar el modelo?", se preguntó. Recordó que la Administración no tiene farmacias. Otra de sus dudas fue sobre la autofinanciación. Se cuestionó cuántos de los presentes, cuando eran jóvenes, estaban dispuestos a pagar la especialidad. Destacó que llevan muchos años reclamando por la remuneración de las guardias.

Preciado Brion se mostró de acuerdo con que habría que dar una vuelta al tema de la autofinanciado. "El tema es que hay que plantearse montarse en este barco", señaló. Lamentó que hay poca implicación y poca comunicación, porque este tipo de debates no llega a todo el mundo. "Qué todo el mundo se vea en la posición de poder tomar una decisión", pensó. Para ella, el camino es "empezar por la recertificación". Molinero puntualizó que tampoco se están planteando que todos los farmacéuticos sean especialistas. "Si somos casi 70.000 farmacéuticos. Los de SEFAC somos 5.500. Si cambiamos el chip los de SEFAC, podremos tirar para adelante", sugirió. Baixauli puso el foco sobre la cantidad de universidades que ofrecen másteres posgrado, de gestión, lo que demostraría que hay una necesidad de la especialidad.

¿Sería obligatorio ser especialista para trabajar en la farmacia? Gallinal contestó que sí y que no. Hay 55.000 farmacéuticos en farmacia comunitaria y no sería posible que todos se especializaran a la vez. Avisó de que cada vez cuesta más encontrar personal para trabajar en la Oficina de Farmacia. Él se siente especialista, porque no tiene nada que ver "el Carlos Gallinal que empezó con el Carlos Gallinal que ahora peina canas". A su juicio, sería más fácil vender un servicio a la Administración diciendo que el farmacéutico que lo daría es especialista. "Quizá sería marketing, porque ya somos especialistas", opinó. Baixauli se preguntó qué pasaría con los que ya están trabajando, puesto que los especialistas acreditados empezarían a salir en siete años aproximadamente. Preciado determinó que para eso estaría la recertificación. Gallinal sopesó que la creación de especialidades está muy vista en España y que sería vía acreditación. Molinero contó que, cuando ella estudiaba, sus compañeros salían siendo licenciados en Medicina y Cirugía, pero han ido evolucionando y ahora son especialistas. "Habrá que tener una acreditación profesional de lo que tú has hecho en estos 40 años. Habrá gente que se haya movido mucho y otros que no se hayan movido nada", aseveró. Los médicos en el presente salen con máster y los farmacéuticos son graduados. Allí se comentó que uno de cada tres médicos trabaja exclusivamente para la Sanidad privada, cuando a residencia es pública.

Por otro lado, Molinero describió que el desarrollo profesional continuo es un conjunto de actividades formativas orientadas a la actualización, desarrollo y mejora de la aplicación del conocimiento, habilidades y actitudes requeridos para una adecuada práctica clínica a lo largo de la vida profesional. Incluye las actividades de formación continuada, las competencias profesionales y de gestión y el conjunto de componentes de lo que se denomina "buena práctica clínica". Se piensa mucho normalmente en los adjuntos, pero los titulares muchas veces no piensan en esa carrera profesional. Criticó que un adjunto puede entrar cuando es graduado y jubilarse con la misma categoría profesional. Lo único es pasar a ser titular. Se preguntó qué les puede motivar si no pueden progresar. SEFAC propuso que la carrera profesional fuera voluntaria y que se tenga niveles de acuerdo con las atribuciones y responsabilidades dentro de la farmacia. Tendría que haber requisitos a cada uno de los niveles. La propuesta de SEFAC engloba cuatro niveles, con áreas de valoración diferentes. La propuesta va ligada a lo que se va a hacer dentro de la farmacia.

Hay un problema para que la farmacia comunitaria sea atractiva para los egresados. "Quizá por el sueldo, por el horario, por la carrera profesional, etcétera", lanzó Baixauli. "Desarrollar tu carrera profesional es tu vida", subrayó Preciado. Gallinal explicó que le parece muy triste cuando se habla de trienios o quinquenios para cobrar más. "Si ligamos la carrera profesional a la productividad sería todo mucho más fácil", observó. Animó a que los farmacéuticos dialoguen con farmacéuticos. Reivindicó que titulares y adjuntos hablen. Avisó de que el servicio bueno es el remunerado.

El último bloque del debate fue el de recertificación. Molinero anunció que se colgará el documento de la propuesta de SEFAC en su web. Resumió que la farmacéutica es una profesión sanitaria con un bagaje científico importante, por lo que hay que seguir formándose. La recertificación sería "una garantía de que yo sigo siendo un farmacéutico que puede atender a la población". No sería una recertificación a la americana. Lo que se va a hacer es "demostrar que en un momento determinado tenemos una serie de competencias para poder atender a la población". El farmacéutico día a día avanza y está adquiriendo nuevas competencias. La propuesta de SEFAC se basa en un modelo de DPC, de seis años, fácil de implementar y de una forma estructurada. No hay que verlo como un examen, sino una autoevaluación. Si no se tiene una competencia, la cuestión es ver cómo se puede conseguir. Todo iría ligado a unos indicadores definidos previamente. Y esto tiene que ir en línea de lo que se hace internacionalmente. Lo primero que habría que definir es un mapa de competencias. De momento, sería voluntario. Se hablarían de niveles: 0-licenciado, 1-básico, 2-medio, 3-avanzado y 4-excelente.