El de la falsificación de recetas y uso fraudulento de medicamentos es un tema constante. Oscar López Moreno, vicepresidente del COF de Madrid (COFM), comentó que los farmacéuticos en este ámbito se sienten un poco desamparados. Eso sí, la Ley de Farmacia da cobertura en este aspecto. Manuel Caamaño, farmacéutico comunitario ...
El de la falsificación de recetas y uso fraudulento de medicamentos es un tema constante. Oscar López Moreno, vicepresidente del COF de Madrid (COFM), comentó que los farmacéuticos en este ámbito se sienten un poco desamparados. Eso sí, la Ley de Farmacia da cobertura en este aspecto.
Manuel Caamaño, farmacéutico comunitario en Usera y profesor asociado de la UCM, señaló que en su zona tiene carteles con "se necesita receta" hasta en chino, porque tiene muchos pacientes de China. Sostuvo que se trata de seguridad. Para él, el botón de impurezas es muy importante. La distribución hace una tarea de control. "Hay mucho control en todos los eslabones de la cadena del medicamento", afirmó. Si bien, "tenemos problemas". Se han desarrollado directivas a nivel europeo y a nivel americano. En España, tenemos el sistema SEVeM, que asegura la trazabilidad de los medicamentos que se dispensan. Por lo cual, "vamos razonablemente bien". En Austria, se ha encontrado Ozempic falsificado.
"Afortunadamente, nuestra receta es mayoritariamente electrónica y tiene los máximos estándares de seguridad", sostuvo. Nos encontramos en un nivel inferior de seguridad las recetas en papel del Sistema Nacional de Salud (SNS). Está hecha en papel del Estado. "El problema está en la receta privada en papel", puntualizó. Es el caballo de batalla.
Se han establecido unos comités de coordinación local entre la Atención Primaria y las Oficinas de Farmacia, para comunicar incidencias y detectar usos fraudulentos. Además, está la herramienta del bloqueo cautelar. En España, los medicamentos son más baratos que en otros países. Lo malo es que hay gente que considera que el medicamento es un producto de consumo más y "confunde precio con valor". El rivotril, alprazolam, ventolin, dostinex, winstrol, toseína y enemas son, en su experiencia, los medicamentos más demandados sin receta. En la receta privada, lamentó que no están implementados los códigos de barra en los repositorios.
Luis Fernando Alguacil, director del Instituto de Estudios de las Adicciones IEA-CEU, de la Universidad CEU San Pablo, insistió en que la primera causa de falsificación de recetas es la automedicación. Otras causas son el consumo recreativo, la intoxicación (fármacos activos en la sumisión química) y comercio (fármacos psicoactivos, por ejemplo). Los reyes en este problema son los ansiolíticos y los antitusivos. Hay un mal uso de las benodiacepinas. También está la automedicación de la ansiedad y de los trastornos del sueño. Y "hay un alarmante aumento de recetas falsas para la sumisión química". La codeína es la otra sustancia presente en las recetas falsas. El purple drank es la droga elaborada a partir del jarabe de la tos. Los opiáceos mayores son los responsables de la epidemia de los opiáceos en Estados Unidos. Aquí, se instauró un visado para las recetas con fentanilo.
Se paró en el dolor crónico no oncológico, donde puede haber cierto riesgo para la automedicación y un cierto diagnóstico erróneo para que se pueda consumir fentanilo. El que tiene dolor no es igual al que lo usa de forma recreativa. Las personas que tienen dolor, el deseo de reducir el consumo está más limitado por la presencia de dolor que por la falta de control.
En los antidepresivos, igualmente se han detectado recetas falsas. El mundo de las recetas falsas es una "pequeña parte del uso fraudulento de medicamentos". Citó la derivación, la falsificación, el encubrimiento. Actualmente, hay un cierto uso de los medicamentos psicoestimulantes y de sustancias que se pueden adquirir sin recetas como dextrometorfano, pero en alta dosis.
Juan José Castro García, inspector jefe de Policía Nacional, jefe de la Sección de Consumo Medio Ambiente y Dopaje (UDEV Central), contó que son una unidad muy especializada, en la que se trabajan organizaciones criminales y nuevos modus operandi. Toda la perspectiva criminal de los medicamentos falsificados y fraudes y delitos asociados a medicamentos la llevan desde ahí. Están aumentando las investigaciones relacionadas con esto y el número de detenidos. Los medicamentos se pueden conseguir en el canal legal aunque luego se desvíen al ilegal y los falsificados en laboratorios clandestinos. Mostró imágenes de laboratorios clandestinos. Dijo que están muy profesionalizados, en lo que al marketing se refiere. Llegan al consumidor sobre todo a través de empresas de paquetería. Una forma de conseguir es a través de las farmacias, con el vaciado de la tarjeta. Lo que ya ha sido prescrito no se le dispensa al paciente y se saca por otro lado, yendo después al canal ilegal. En las recetas privadas, no hay recetas falsas en sí, sino sellos falsos de médicos.
Sostuvo que están muy atentos al fentanilo, al rivotril (sus vías de obtención están siendo muy variadas). Como policías, están presentes en todos los foros posibles. Se encargan de ver si detrás está un enfoque criminal o no. Están en contacto permanente con la AEMPS. Anotarlo como una devolución o el juego con los inventarios son modus operandi que hay. Informó del teléfono 24 horas que está a disposición de quien necesite un asesoramiento policial: 628711298.
Por último; Pilar Jimeno, directora general de Inspección y Ordenación Sanitaria de la Comunidad de Madrid, indicó que esto pone en riesgo la salud de los pacientes y socaba la confianza en el sistema. A su juicio, es primordial buscar sinergias y trabajar de manera coordinada. Se falsifican las recetas para obtener ilegalmente medicamentos como destino al mercado ilegal o porque son medicamentos susceptibles para ser utilizados con fines no terapéuticos. Se mostró de acuerdo con que los medicamentos estupefacientes, los psicotrópicos y otros medicamentos psicoactivos, por sus propios efectos sobre el Sistema Nervioso Central, las hormonas sexuales con actividad androgénica y anabolizante, por su efecto potenciador del desarrollo muscular y la capacidad física en individuos sanos, los medicamentos antidiabéticos, por aumentar el volumen muscular al estimular la síntesis de proteínas y, por tanto, el crecimiento muscular, fundamentalmente en el mundo del culturismo, son los medicamentos más frecuentes en esta problemática. Destacó que el farmacéutico debe apuntar la identidad de las personas en la dispensación de medicación psicotrópica y estupefaciente. La primera razón es por la seguridad del farmacéutico y es importante que se apunte el DNI, que puede no coincidir con el de la persona en cuestión.
Precisó el karkubi como modus operandi para obtener el medicamento en la Oficina de Farmacia personas adictas al producto: usuarios con antecedentes de drogadicción a los que los grupos delictivos les entregan las recetas ya cumplimentadas y acuden con ellas y portando su tarjeta sanitaria y DNI a las Oficinas de Farmacia para obtener la medicación para posteriormente entregarla a quienes les entregaron las recetas. El pago del servicio, si se ha "conseguido suficiente cantidad", consiste en un envase de rivotril.