Una gran cantidad de niños y adolescentes sanos europeos presentan déficit de vitamina D

Cuando el aporte de este nutriente, de forma natural, es insuficiente en niños o bebés lactantes, se aconseja la suplementación con vitamina D o colecalciferol

14/08/2023

La Sociedad Española de Gastroentoloría Pediátrica Hepatología y Nutrición (ESPGHAN) da a conocer que una gran cantidad de niños y adolescentes sanos europeos presentan déficit de vitamina D. Una vitamina que es una molécula imprescindible para el desarrollo y funcionamiento de nuestro organismo, especialmente durante los primeros años de vida. Es ...

La Sociedad Española de Gastroentoloría Pediátrica Hepatología y Nutrición (ESPGHAN) da a conocer que una gran cantidad de niños y adolescentes sanos europeos presentan déficit de vitamina D.

Una vitamina que es una molécula imprescindible para el desarrollo y funcionamiento de nuestro organismo, especialmente durante los primeros años de vida. Es liposoluble (se disuelve en grasas y aceites), y se sintetiza en la piel gracias a la acción de la luz solar y se puede obtener además en menor cantidad a través de los alimentos que la contienen de manera natural (pescados grasos) o que han sido suplementados por ella (huevos, la mantequilla, margarina, entre otros).

"Sus funciones consisten principalmente en mantener huesos, músculos y nervios saludables, apoyar el sistema inmunitario y ayudar al cuerpo en la absorción del calcio que se encuentra en los alimentos. En este sentido, la vitamina en cuestión es uno de los micronutrientes más importantes para la salud de las personas de ahí la importancia de ser suplementado en casos de deficiencia para evitar complicaciones", explica la Dra. Ana Ortiz, gerente del Área de Salud Farmasierra.

Las personas con mayor riesgo de sufrir carencia de vitamina D son los adultos mayores, las personas con obesidad, celiaquía u otras enfermedades e incluso los bebés lactantes. Un déficit en los primeros meses de vida puede afectar el desarrollo del niño, incrementar el riesgo de raquitismo (enfermedad que debilita y ablanda los huesos) y patologías como la diabetes mellitus, la obesidad y enfermedades infecciosas, entre otras.

Carencias de vitamina D en bebés

Durante los primeros meses de vida en el seno materno, el bebé suele tener aportes suficientes de vitamina D, ya que la recibe por parte de la madre y la almacena durante el embarazo. Sin embargo, dicho almacenamiento no asegura la aparición de posibles carencias en un futuro.

En la primera infancia es crítico garantizar los niveles adecuados de vitamina D, especialmente en aquellos niños que por distintas causas estuvieran en riesgo identificado, como es el caso de niños prematuros, hijos con lactancia materna o lactantes alimentados con leche de fórmula no suplementada, niños con baja exposición a la luz solar bien sea por hábitos culturales o por usar filtro solar en los paseos al aire libre, niños con piel oscura o niños obesos.

La Asociación Española de Pediatría recomienda que los lactantes menores de un año alimentados al pecho o con leche de fórmula adaptada deben recibir un suplemento diario de 400 UI de vitamina D.

"En los más pequeños, la vitamina D es igual de fundamental que en los adolescentes y adultos. De hecho, su caso es más complejo, debido a que su fuente principal de alimento es la leche materna, la cual es naturalmente pobre en vitamina D; y a su vez, su exposición al sol es casi nula. Esto último se debe a la necesaria protección frente a la exposición solar en edad pediátrica para evitar quemaduras y problemas relacionados con la piel", asegura la Dra. Ana Ortiz.

Los beneficios de alcanzar los niveles óptimos de vitamina D, ya sea de manera natural o con ayuda de suplementos, son varios. Sin embargo, en caso de suplementación, es fundamental informarse sobre su dosis apropiada, ya que el exceso vitamínico tampoco es saludable y trae consigo otras consecuencias. La cantidad general recomendada de vitamina D para los bebés menores de un año es de 400 UI al día.

Autor: IM Farmacias