La tarde del primer día de Infarma ha arrancado en el espacio Ágora con la charla `Disfagia y toma de medicamentos´, patrocinada por Nestlé Health Science. Se calcula que más de dos millones de personas en España padecen disfagia y que aproximadamente el 90% de la población que sufre este ...
La tarde del primer día de Infarma ha arrancado en el espacio Ágora con la charla `Disfagia y toma de medicamentos´, patrocinada por Nestlé Health Science. Se calcula que más de dos millones de personas en España padecen disfagia y que aproximadamente el 90% de la población que sufre este trastorno no está ni diagnosticada ni correctamente tratada. El 90% de los casos no diagnosticados son mayores de 65 años, asociados a patologías como ACV, Parkinson, procesos oncológicos, enfermedades neurológicas. Los cuidadores y los familiares desconocen la problemática y el riesgo y las complicaciones tan graves asociadas a la disfagia. "No puede ser que, ante un problema tan importante como la disfagia, no tengamos idea. Tenemos poca formación, es nuestra obligación como farmacéuticos formarnos y aprender", ha empezado Beatriz Collado, vocal de Alimentación y Nutrición del COF Madrid.
Y es que la farmacia es un punto clave para ayudar a las personas con disfagia, tanto a enfermos como a cuidadores. "Tenemos la gran suerte de contar con una campaña para ayudar a dar solución a este problema", ha señalado Collado, quien ha presentado una campaña que arrancará el 25 de abril para detectar los casos que no están diagnosticados, evitar problemas nutricionales asociados a la disfagia y ayudar a mejorar la calidad de vida de los pacientes. "Este es nuestro reto: ayudar a mejorar su calidad". Esta campaña también promoverá el uso racional de los medicamentos.
En el webinar del próximo 25 de abril "se tratarán aspectos como explicación de la enfermedad; el abordaje nutricional y hábitos que debemos informar y explicar a los clientes; y la disfagia y los medicamento".
Disfagia, una aproximación
Anna Paré, farmacéutica y nutricionista con una farmacia en Castellar del Vallés, ha acercado la disfagia a los asistentes a la conferencia. Ha explicado que la disfagia es el trastorno de la deglución que impide tragar bien, y que podemos encontrar disfagia a líquidos, sólidos o mixta. Más de 30 músculos están implicados en la deglución. Cuando se produce disfagia, puede ser por fallo del sistema nervioso o que los músculos estén debilitados, como es el caso de los pacientes con sarcopenia.
"El 75% de los casos diagnosticados se da en personas mayores y en personas con enfermedad neurológica o neurodegenerativa", ha señalado Paré, quien ha resaltado, por ejemplo, que "el 50% de los pacientes con un ictus tendrá disfagia". Así, una de cada cuatro personas mayores de 70 años tiene disfagia. Pero, tal y como ha resaltado Paré, "no son datos reales, porque la disfagia está infradiagnosticada". Es por este motivo que los farmacéuticos "tenemos la labor de sensibilizar a la población y dar a conocer la enfermedad".
¿Qué signos pueden alterarnos de la disfagia? Hay algunos más evidentes, como el atragantamiento frecuente; las degluciones fraccionadas; los residuos de comida en la boca o la lengua; el babeo; el carraspeo frecuente o tos durante o después de las comidas; la duración excesiva de la comida o el rechazo por comer.
Pero también hay algunos menos evidentes como los picos de fiebre de repetición sin causa aparente; las infecciones respiratorias o de orina; las pérdidas de peso o los cambios de voz después de la deglución.
En cuanto a las consecuencias de la disfagia, encontramos la pérdida de la eficacia en la deglución (provocando casos de desnutrición y deshidratación) y la pérdida de la seguridad en la deglución (aspiraciones que provocarán infecciones respiratorias y neumonía). En definitiva, "las propias complicaciones de la disfagia van a empeorar el cuadro clínico de la persona".
¿Cómo puede intervenir el farmacéutico?
Ante esta pregunta, Anna Paré lo tiene claro: "De muchas maneras". "En primer lugar, facilitando la detección de la misma; en segundo lugar, dando un buen consejo nutricional para prevenir aspiraciones, desnutrición y deshidratación, consejos para que coman de forma segura, adaptar la textura de los alimentos, adaptar la viscosidad de los alimentos, para una deglución segura, etc."
Otros aspectos importantes en los que puede intervenir el farmacéutico es explicando cómo hacer una correcta limpieza oral en estos casos, "y revisar la medicación". ¿Con qué propósito? "Si no puede tragar, los medicamentos no tendrán un buen cumplimento terapéutico. Si trituramos los medicamentos, aumentamos las reacciones adversas". De este modo, hay que "revisar los medicamentos que toma, qué alternativas tenemos, explicar cuáles son los comprimidos que se pueden triturar y cuáles no, cómo administramos esta medicación, etc." Para facilitar la toma de decisiones, Paré ha explicado un algoritmo y ha hablado de la App Deglufarm, de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH).
La visión del paciente
A continuación, ha sido el momento de conocer la opinión de Nuria Jordà, una joven que vive en primera mano la disfagia. "La disfagia ha sido entrar en un mundo de prueba y fallo. Nadie me dijo al salir del hospital cómo vivir porque, literalmente, es volver a aprender a vivir", ha rememorado.
De los retos de su día a día, Jordà ha explicado que la higiene bucal o adaptarse a la saliva. "Para mí, tragar la saliva se me hace un mundo. Es algo involuntario y sencillo, y a mí me cuesta la vida. El reto más complicado ha sido poder hablar tragando saliva, ir a la piscina o incluso hacer deporte porque segregamos más saliva haciendo deporte".
Jordà también he explicado que bajó 15 kilos y perdió toda la fuerza muscular. "Pensaba que no iba a salir de allí, pero gracias al logopeda empecé a realizar ejercicios de fuerza lingual y de garganta. Empecé un tratamiento y ejercicios de lengua. El objetivo es que m garganta tenga la fuerza otra vez que ha perdido".