Tal y como manifiesta Jordi Casas Sánchez, presidente del Consell de Col·legis Farmacèutics de Catalunya y del COF Barcelona, "la iniciativa está funcionado muy bien y se está demostrando que la farmacia es un recurso sanitario clave para contribuir a cortar cadenas de contagios y descongestionar los Centros de Atención ...
Tal y como manifiesta Jordi Casas Sánchez, presidente del Consell de Col·legis Farmacèutics de Catalunya y del COF Barcelona, "la iniciativa está funcionado muy bien y se está demostrando que la farmacia es un recurso sanitario clave para contribuir a cortar cadenas de contagios y descongestionar los Centros de Atención Primaria. Muestra de ello son los más de 70.000 test supervisados que han realizado las farmacias comunitarias catalanas desde el pasado mes de julio, gracias a los cuales se han detectado más de 800 casos positivos. A su vez, el índice de positividad va en la línea del que se ha registrado en otros dispositivos puestos en marcha entre población asintomática".
Desde el inicio de la pandemia las farmacias se ofrecieron para dispensar test de antígenos, y siempre tuvieron claro que era necesario ir un paso más allá, abriendo la posibilidad de supervisar los test y registrar los resultados. El pasado 19 de julio, en la comunidad se puso en marcha el cribado con test de antígenos a participantes y monitores del ocio educativo de verano (casales, campamentos, etc.). Visto el buen resultado de este, y coincidiendo con el inicio del curso escolar, se ha ampliado a alumnado y profesorado, formando parte de la estrategia de seguimiento de casos de personas consideradas contacto estrecho y que están inmunizadas. En paralelo, las farmacias participantes en este programa también pueden supervisar, entre la población general, test de antígenos de autodiagnóstico y registrar el resultado.
Cambio de paradigma
Las dificultades de poner en marcha un proyecto de estas características no fueron pocas, y en este sentido el presidente recuerda que "en menos de una semana definimos el protocolo, realizamos una formación a las más de 1.000 farmacias que se apuntaron y les hicimos llegar las credenciales del aplicativo de Salut para que pudieran llevar a cabo el cribado. La urgencia del momento hizo posible que se agilizara la interconexión entre la red de farmacias y el sistema de información del sistema público de salud más allá de los aplicativos de dispensación a través de receta electrónica. Así pues, el trabajo realizado por todas las partes considero que fue excepcional, pero pone de manifiesto la falta de interconexión entre bases de datos, algo imprescindible para el registro y la notificación de los datos. Considero que este proyecto es paradigma de la manera de trabajar que tendría que haber. Espero que las experiencias que hemos implementado recientemente sirvan para que, en el futuro, sea más sencilla su aplicación".
Paso a paso, la pandemia está dando a la farmacia espacios y ocasiones en las que reivindicar su valor como agente sanitario relevante, y en este sentido, Casas considera que ha puesto de manifiesto que la capilaridad de la red de farmacias ha sido de gran utilidad, como punto sanitario accesible y de proximidad y, a su vez, que los farmacéuticos están preparados para dar respuesta a las necesidades de la sociedad desde una vertiente más asistencial.
"Las estrategias de salud pública coordinan diferentes niveles de actuación y, concretamente, la actuación a nivel comunitario es imprescindible, que es donde se encuentra la farmacia. Más allá de la estrategia de cribados con test de antígenos, los farmacéuticos también se han implicado en el proyecto Jo DIC!, acrónimo de Derivación, Información y Concienciación. En el marco de esta iniciativa, las farmacias realizan una vigilancia epidemiológica integrada para la identificación y derivación de casos con sintomatología compatible con Covid-19".
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