"Trabajaremos por seguir construyendo un colegio útil para los colegiados y los ciudadanos"

Como ya informamos, el Col·legi de Farmacèutics de Barcelona (COFB) dio por cerrado el pasado 2 de julio su proceso electoral con la proclamación de la candidatura encabezada por Jordi Casas como electa, tras no presentarse candidaturas alternativas. Es quien sustituirá a Jordi de Dalmases como presidente del COFB. Aclara que la nueva Junta de Gobierno ha planteado cuatros grandes objetivos para dicha institución: "Asegurar la solvencia, eficiencia y sostenibilidad del COFB; liderar la consolidación profesional en todos los ámbitos de ejercicio de la profesión; promover el posicionamiento del farmacéutico como agente de salud y fomentar la innovación, digitalización, agilidad, transparencia y proximidad".

¿Por qué cree que la suya fue la única candidatura presentada? Contesta que estaba convencido de que habría más de una y que, en todo momento, contemplaba un escenario en el que se celebrarían elecciones. "No ha sido así finalmente y desconozco cuáles pueden ser los motivos. No obstante, tanto la Junta como yo en particular agradecemos la confianza que se ha depositado en nosotros, y trabajaremos por seguir construyendo un colegio útil para los colegiados y los ciudadanos", declara.

Defiende que la relación del COF con los colegiados debe ser útil, próxima y transparente. Para conseguirlo, se han marcado como propósitos aumentar la participación de los colegiados de todos los ámbitos, mejorar la experiencia de colegiado en el COFB y acercarse a los graduados jóvenes, así como a las universidades para potenciar la pre-colegiación.

Casas ha sido secretario del COFB en los últimos cuatro años y, anteriormente, del 2012 al 2016, ocupó el cargo de vicetesorero. Eso sí, prefiere huir del concepto de si su etapa va a ser continuista o no con la de De Dalmases. Alega que lleva ocho años trabajando "por un modelo de farmacia asistencial, donde la digitalización ha ido ganando una presencia cada vez más relevante". Destaca que continuar en la línea del crecimiento profesional es el rumbo hacia donde se quieren dirigir. Añade que cada Junta es diferente y que el hecho de contar con diez nuevas incorporaciones, la mitad de sus miembros, de entrada "ya representa un relevo generacional que, sin duda, enriquecerá a la farmacia y a la institución con nuevos puntos de vista".

Insiste en que las propuestas que plantean para la nueva etapa en el COFB son, en primer lugar, promover la eficiencia de la estructura colegial y optimizar recursos y procesos estableciendo más sinergias con otros COF catalanes. Esto iría acompañado de la puesta en marcha de iniciativas enfocadas al desarrollo económico y social, incluyendo la mejora del medio ambiente y el desarrollo sostenible.

En segundo lugar, "impulsar todos los ámbitos de ejercicio y los nuevos retos profesionales de forma valiente; como, por ejemplo, definir el papel del farmacéutico en el escenario post-Covid y consolidar todas las potencialidades demostradas por nuestro colectivo". Igualmente; seguirán apostando por la formación como línea estratégica, velarán por la rigurosidad en el cumplimento de las normas y promocionarán la investigación como herramienta para fomentar la calidad de la profesión.

En tercer lugar, la idea es mantener el impulso del posicionamiento del farmacéutico como agente de salud, potenciando el rol profesional de cada ámbito de ejercicio, creando alianzas con otras instituciones profesionales, estando presente en los foros relevantes de la Administración y de la sociedad donde se hable de salud y comunicando a la sociedad la acción profesional.

Por último, en su mente está el apostar por la digitalización y las nuevas tecnologías, promoviendo, entre otros proyectos, un portal de trámites online y potenciando los webinars y reuniones telemáticas. Por supuesto, el "construir un colegio todavía más útil, próximo y transparente para el colegiado".

En cuanto a cuál va a ser la primera medida a adoptar por él; señala que, en estos momentos, la prioridad es, por un lado, incorporar a los nuevos miembros de Junta en un escenario donde la presencialidad será complicada y, por otro lado, continuar proporcionando herramientas útiles e información actualizada a los colegiados, sobre todo en un momento tan delicado como el actual, fuertemente marcado por el Covid-19. A partir de ahí, con tiempo, pondrán en marcha los diferentes proyectos comentados.

Sobre cuál debe ser la aportación de los farmacéuticos de Barcelona a la gestión de la crisis sanitaria del Covid-19, ante un rebrote o un confinamiento forzoso en la provincia, Casas afirma que, como profesionales sanitarios, se ponen a disposición del sistema sanitario para dar respuesta a las necesidades que surjan, tal y como ya hicieron durante el estado de alarma. Sostiene que, desde los diferentes ámbitos de ejercicio de la profesión farmacéutica, se han implicado activamente en el abordaje del Covid-19 y así lo han demostrado en las diversas acciones que han llevado a cabo.

Acto seguido, cita algunas de ellas. En el caso de Farmacia Hospitalaria, se ha trabajado en la actualización constante de los protocolos de tratamiento aplicados en los centros hospitalarios. En Atención Primaria, se ha efectuado una gestión continuada de la evidencia científica y se han creado circuitos de coordinación con otros ámbitos asistenciales farmacéuticos. En el ámbito de análisis clínicos, el papel del laboratorio ha sido clave, sobre todo, para valorar la gravedad de la enfermedad y predecir el riesgo de evolución hacia formas más severas. Gracias a la Distribución, se ha garantizado la accesibilidad al medicamento durante la situación de emergencia. La Farmacia Comunitaria ha aplicado con celeridad medidas excepcionales para descongestionar el sistema sanitario. Por su parte, la Industria ha asegurado el suministro de los medicamentos esenciales utilizados en las UCI y se ha implicado en la investigación de vacunas y potenciales tratamientos.

Hace hincapié en que, durante el Covid-19, desde el ámbito de la Salud pública, "los farmacéuticos han formado parte y han dado soporte a los equipos de vigilancia epidemiológica, elaborando encuestas, recomendaciones de confinamiento domiciliario y estudiando los casos positivos y sus contactos, facilitándolos protocolos de seguridad".

Asimismo, "han dado soporte a los planes de contingencia en centros de personas mayores para prevenir el contagio de residentes y trabajadores y han hecho seguimiento de la aplicación de los protocolos mediante visitas y redacción de informes". Esto incluye sectorización por zonas del centro; control de circuitos de ropa, comida; aislamientos de los residentes, limpieza y desinfección, entre otros. Del mismo modo, se han formado a los responsables de prevención e higiene de las actividades de ocio de verano 2020 en los ámbitos de la protección e higiene alimentaria.

¿Cuál es su visión sobre cómo ha de ser el futuro de la profesión farmacéutica? "Tenemos mucho que aportar a la sociedad y al conjunto del sistema sanitario, por lo que en el futuro de la profesión farmacéutica será imprescindible definir el papel que tendrá la farmacia en los grandes retos de salud; que son el envejecimiento progresivo de la población, la cronicidad y la dependencia", reflexiona. Cree que incluso será imprescindible apostar por equipos multidisciplinares, tanto entre los ámbitos de ejercicio de la profesión, como con el resto de los profesionales sanitarios.

En definitiva, "en un futuro deberíamos conseguir una mayor consolidación de la figura del farmacéutico, más integración en el tejido sanitario y desempeñar nuevos roles para seguir siendo parte de la solución a las necesidades de la población". Para llevar a cabo sus propuestas, considera que "será fundamental contar con los 20 miembros de la Junta de Gobierno, procedentes de diferentes ámbitos de ejercicios, y con el equipo humano y profesional del COFB, que actúa en coherencia con los objetivos de la Junta y hace posible que el Colegio desarrolle todas sus funciones y trabaje para todos los colegiados".