La implementación de más herramientas digitales mejoraría el rendimiento de los laboratorios farmacéuticos

Las herramientas digitales ya están presentes en nuestro día a día, pero hace relativamente poco tiempo de la implantación de estas en las empresas. Para tener una visión más general y veraz acerca de esta situación, el pasado mes de julio AIO Health Pro realizó una encuesta a la que respondieron responsables y directivos de empresas de laboratorios farmacéuticos principalmente.

Los responsables y directivos de la industria lo tienen claro, un 86% de los participantes de la encuesta aseguran que el rendimiento de su departamento mejoraría con la adopción y el uso de nuevas herramientas digitales.

No obstante, sorprende que el presupuesto para estas acciones se sitúa en menos de un 20% en un 60% de los casos. ¿A qué se debe esta descompensación? ¿Por qué la dotación presupuestaria es baja? La mitad de los encuestados tienen la creencia de una menor eficacia de este tipo de herramientas a pesar de manifestar que el rendimiento del departamento podría mejorar con ellas. También indican como barreras, tener otras prioridades marcadas por la dirección general y escaso presupuesto en general.

La velocidad de implementación de estas herramientas es lenta. Con los años que llevamos en entornos de transformación digital, un 33% de los encuestados han adoptado herramientas digitales hace poco más de 1 año, y un 20% aún no han empezado. Solo la mitad de los encuestados llevan más de tres años implementando estas estrategias digitales en su día a día.

AIO Health Pro preguntó también sobre qué tipo de herramientas digitales se están implementando. De esta cuestión se desprende que se generan tres grandes bloques. Por un lado, están las herramientas para mejorar la comunicación a profesionales sanitarios y pacientes, tres de cada cuatro encuestados declaran que en sus organizaciones ya tienen herramientas específicas para la comunicación a profesionales sanitarios.

El segundo bloque son las herramientas de formación para médicos y farmacéuticos básicamente. Casi un 40% tienen herramientas de e-learning para médicos, pero solo un 14% para formación remota a farmacias, donde hay una clara línea de mejora en todos los laboratorios.

El último bloque está dedicado a las herramientas comerciales, en las que no se incluye CRM o software de ventas, sino la acción comercial en sí misma, es decir, realizar la visita comercial en remoto. En este punto tan solo un 9,5% declararon tener herramientas para incrementar la productividad y eficacia comercial.

Cuando la encuesta cuestionó acerca del tipo de herramientas que se están valorando implementar en un futuro, los porcentajes cambian. Lógicamente disminuyen mucho las herramientas para comunicación a profesional o paciente, cuando ya las tienen, la inversión es residual para irlas mejorando y actualizando. Sube mucho la formación remota a farmacias, que pasa del 14% al 29%, y la acción comercial remota a farmacias, que se sitúa en un 19%, lo que nos indica que hay un claro movimiento hacia estrategias enfocadas al punto de venta.

Es de suponer que la tendencia será ir adoptando herramientas digitales más complejas y que pongan en contacto al profesional sanitario y al laboratorio farmacéutico a través de distintas herramientas y soluciones a las implementadas en la actualidad.

La encuesta se ha realizado este mes de julio a responsables y directivos de laboratorios farmacéuticos principalmente. Siendo dos de cada tres encuestados de los departamentos de marketing y ventas, y facturaciones superiores a los 10 millones de euros al año, y un mix entre laboratorios con medicamentos de prescripción y productos de Consumer Healthcare.

AIO Health Pro favorece y garantiza que los principales actores del actual escenario de la salud (médicos, farmacias, pacientes, instituciones médicas) dispongan de más opciones para comunicarse entre sí y con la industria farmacéutica. Ofrece soluciones comerciales y de marketing a laboratorios farmacéuticos, para potenciar la recomendación, prescripción de médicos, farmacéuticos y otros profesionales sanitarios, y el sell out en farmacias.