El Molluscum contagiosum es una enfermedad viral cutánea benigna y contagiosa que, en ocasiones, es asintomática pero que en otros casos y, dependiendo de su evolución, se manifiesta con unas pápulas o lesiones cutáneas, pequeñas e indoloras que pueden crecer hasta convertirse en nódulos de color carne y apariencia de ...
El Molluscum contagiosum es una enfermedad viral cutánea benigna y contagiosa que, en ocasiones, es asintomática pero que en otros casos y, dependiendo de su evolución, se manifiesta con unas pápulas o lesiones cutáneas, pequeñas e indoloras que pueden crecer hasta convertirse en nódulos de color carne y apariencia de perla. La pápula suele presentar un hoyuelo en el centro. Cuando el afectado se rasca, la misma irritación provoca que el virus se propague en filas o grupos, por lo habitual, en cara, cuello, axilas, brazos y manos (nunca en palmas de las manos y plantas de los pies).
Esta patología, frecuente en niños por sus características (un sistema inmunitario inmaduro y facilidad de contagio), es motivo recurrente de consulta en el área de Pediatría de Atención Primaria y de Dermatología. Posiblemente sea la infección por virus cutánea más frecuente en la infancia. Aunque la incidencia del molusco es difícil de establecer, según datos aportados por el Doctor Antonio Torrelo Fernández, jefe del Departamento de Dermatología Pediátrica del Hospital Niño Jesús de Madrid y presidente de la Sociedad Internacional de Dermatología Pediátrica (ISPD), se señala una incidencia relativa acumulada del 3,2% media en la población infantil a lo largo de un año. Estas cifras aumentan hasta al 10% en niños de edades comprendidas entre los 4 y 6 años.
El contagio se produce a través del contacto directo con la piel o mucosas de la persona afectada, a través de objetos contaminados, como juguetes, o fuentes de infección tales como toallas, flotadores y piscinas. De ahí que, en verano, cuando las actividades acuáticas son frecuentes, debamos prestar especial atención a este trastorno.
Asimismo, el doctor Antonio Torrelo Fernández ha señalado "la importancia de la coexistencia de la dermatitis atópica con el molusco contagioso y, aunque los estudios epidemiológicos no reconocen por completo esta asociación, en la práctica diaria es frecuente que el paciente que tiene moluscos casi siempre posee un trasfondo atópico, aunque no haya desarrollado una verdadera dermatitis atópica. De hecho, muchos pacientes aparecen en la clínica con lesiones de molusco contagioso rodeadas de un halo de eccema o simultáneamente con eccema".
Es benigno, pero hay que tratarlo
Una vez en la consulta del médico, puede presentarse el dilema de si tratar o no el Molluscum contagiosum. Por un lado, estamos hablando de lesiones de carácter autolimitado y benigno y, a veces, el tratamiento puede ser incómodo o doloroso. Sin embargo, existen importantes razones que ejercen de contrapeso a estos argumentos. Aunque tiende a desaparecer en pocos meses, en pacientes con cierto grado de inmunodepresión, sobre todo en pacientes atópicos, el proceso puede hacerse interminable -hasta cuatro años-. A eso hay que añadir que suele producir una estigmatización en el paciente, ya que se prohíbe al niño participar en determinadas actividades, como la piscina, o percibe el rechazo de sus compañeros, impidiendo que se desenvuelva en su entorno con normalidad. Por último, pero no menos importante, si no se trata, se produce una diseminación y autoinoculación siendo una fuente de contagio.
Entre los tratamientos existentes, los especialistas destacan dos opciones seguras y efectivas: el curetaje -sin anestesia, con anestesia tópica o sedo-anestesia según la edad y el número de lesiones del paciente- y la utilización de potasa (Hidróxido de potasio) al 10%. El Doctor José Ángel Pérez Quintero, médico pediatra, profesor asociado de Pediatría de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sevilla y director del Centro de Salud Pino Montano B de Sevilla, apunta que numerosos ensayos demuestran que la utilización del hidróxido de potasio funciona. "La conclusión a la que se ha llegado es que el 97% de los niños tratados han conseguido resolver el problema de los Molluscum con un grado de tolerabilidad magnífico". Sobre la aplicación en las lesiones de hidróxido potásico al 10%, el doctor Torrelo Fernández afirma que "bien utilizado, posee un índice de probabilidad de curación prácticamente igual al del curetaje y los familiares pueden hacerlo en casa después de haber recibido las pertinentes instrucciones de uso".
Molusk, una solución práctica, indolora y que pueden aplicar los padres
Molusk Solución Cutánea KOH 10%, de Laboratorios Viñas, es un tratamiento para el Molluscum contagiosum incruento, rápido e indoloro. El principio activo, de eficacia radical, actúa externamente desnaturalizando las proteínas de los queratinocitos donde replica el Poxvirus causal. Se trata de un cauterizante práctico y económico que puede ser aplicado por los padres en casa con elevada eficacia y seguridad, siempre que se sigan correctamente las instrucciones.
Molusk presenta una concentración al 10% de hidróxido de potasio, la que ha demostrado ser la más efectiva. Un estudio comparativo de la eficacia de una solución de KOH 10% y una crema de Imiquimod 5% concluyó que el KOH al 10% tiene un inicio de acción más rápido y una eficacia mayor, ya que el efecto cauterizante tisular del KOH 10% es más rápido y efectivo que el Imiquimod al 5%, cuya acción mediando en la inducción de la inmunidad celular es más retardada. Por otra parte, el tratamiento con KOH al 10% también evitaría la aparición de nuevas lesiones previniendo la autoinoculación al actuar de forma más directa e inmediata.
Otro estudio clínico aleatorio a doble ciego en el que se comparó KOH 10%, KOH 15% y placebo, demostró que los dos primeros presentan altas tasas de eficacia, que son muy similares entre sí, pero es mejor tolerado el KOH 10%. Hubo 4 abandonos en el grupo KOH 15% relacionados con el tratamiento frente a ninguno en el grupo de KOH 10%.
Sobre la eficacia de la solución KOH al 10% aplicada mediante el dispositivo especial de Molusk para garantizar precisión, seguridad de uso y máxima eficiencia, en un estudio clínico, tanto médicos como pacientes, juzgaron excelente la aplicabilidad del producto en un 95% de los casos. El sistema de aplicación de máxima precisión de Molusk®, con un pincel cónico muy estrecho y puntiagudo, permite aplicar mediante toques el producto con exactitud, hasta la aparición de un eritema inflamatorio en la base de la lesión, en cuyo momento deben interrumpirse las aplicaciones sobre esa lesión. Por otra parte, el envase del sistema de Molusk® está dotado de una válvula de seguridad anti-vuelco, que aporta una seguridad adicional al impedir o disminuir el posible vertido del líquido en caso de caída del tubo contenedor.
Seguir las indicaciones de aplicación, de vital importancia
Las instrucciones de aplicación de Molusk deben seguirse con exactitud. Los pasos son sencillos, pero conviene ser riguroso.
Paso 1. Aplicación. Desenroscar el tapón del envase e introducir la varilla aplicadora en él. Retirar la varilla (ya humedecida), y aplicar el producto tocando ligeramente con la punta del pincel cada lesión de la forma más precisa posible (evitar tocar la piel sana del contorno del molusco, ya que provocaría irritación).
Paso 2. Esperar 1 o 2 minutos. Dejar secar el producto durante 1 o 2 minutos. Durante este tiempo hay que prestar especial atención para que el niño no se toque las zonas tratadas.
Paso 3. Retirar el producto. Aclarar la zona con agua usando una gasa empapada para eliminar los restos del producto y, a continuación, lavar las manos con agua abundante.
Repetir el tratamiento 1 vez al día en cada una de las lesiones hasta la aparición de enrojecimiento, irritación o inflamación en las mismas (en general aparece pasados de 4 a 6 días). Una vez aparecido el enrojecimiento en una lesión, debe finalizar el tratamiento de esa lesión (no en el resto). Las lesiones de los moluscos desaparecen gradualmente de 2 a 5 semanas después de la aparición del enrojecimiento.
No se debe aplicar Molusk sobre la misma lesión durante más de 10 días consecutivos. Y si se olvida aplicarlo un día, no debe aplicarse dos veces al día siguiente.
En este vídeo podrás ver el paso a paso: