Novedades en las fórmulas infantiles a base de leche de cabra

Existe un consenso general sobre que la leche materna es la mejor fuente de nutrición para los bebés. Su perfil específico de ácidos grasos proporciona, además de aporte energético, una absorción de grasa óptima. Sin embargo, no todas las madres tienen la oportunidad de amamantar, y la alternativa son las leches de fórmula infantiles.

Entre los profesionales sanitarios y las familias, las fórmulas infantiles a base de leche de cabra se han hecho con un hueco importante por sus buenos resultados en lactancias más naturales y suaves, que favorecen una mejor digestión para los bebés debido a las propiedades naturales de la leche de cabra.

En estos momentos, las fórmulas a base de leche de cabra se consideran idóneas para una correcta nutrición de los bebés con lactancia artificial desde su inicio y, lógicamente, también en casos de una lactancia mixta. Las particularidades que aporta la fórmula a base de proteína de cabra, y que marcan algunas diferencias con respecto a las fórmulas tradicionales a base de proteína vacuna, se basan sobre todo en el proceso de elaboración y en las características peculiares de la leche de cabra.

Un ensayo clínico muestra resultados prometedores para la salud digestiva de los bebés y la reducción de la regurgitación

El ensayo clínico TIGER se ha realizado entre bebés lactantes en transición de la lactancia materna a la alimentación con leche de fórmula, comparando los efectos de la fórmula hecha con leche entera de cabra y la fórmula de leche de vaca en la regurgitación infantil. Los resultados sugieren que la fórmula de leche entera de cabra puede ofrecer beneficios digestivos en comparación con la fórmula de leche de vaca.

Así, los bebés alimentados con leche de fórmula a base de leche entera de cabra regurgitaron hasta seis veces menos por semana, mientras que solo hubo una reducción de menos de dos veces para los bebés alimentados con fórmula de leche de vaca.

El ensayo también descubrió que los bebés alimentados con fórmula de leche de cabra entera tenían niveles más bajos de marcadores de estrés e inflamación en su saliva (cortisol y proteína C reactiva) después de dos semanas, mientras que el grupo de fórmula de leche de vaca no mostró cambios significativos.

El ensayo fue dirigido por Dairy Goat Co-operative, la cooperativa de ganaderos caprinos de Nueva Zelanda fabricantes de la fórmula infantil Capricare. "Estos hallazgos proporcionan información valiosa sobre cómo las diferentes fórmulas infantiles afectan a la digestión y a los marcadores de estrés" , ha comentado la profesora Sirinuch Chomtho , investigadora principal del ensayo TIGER y directora de la División de Nutrición y del Centro de Excelencia en Nutrición Pediátrica de la Universidad de Chulalongkorn en Bangkok. "Es necesario realizar más investigaciones, pero estos resultados sugieren que la fórmula de leche de cabra entera es una opción beneficiosa para aquellos bebés que están dejando de tomar leche materna" , ha añadido.

Beneficios naturales de la leche de cabra

Hay dos elementos naturales que se encuentran en la leche de fórmula hecha a base de leche de cabra y que ayudan al desarrollo del bebé: el ácido palmítico sn-2 y la membrana del glóbulo de grasa de la leche (MFGM, por sus siglas en inglés).

El ácido palmítico en la posición sn-2 se encuentra en niveles altos en la leche materna, pero es escaso en el aceite vegetal (que tiene ácido palmítico en las posiciones 1,3). El ácido palmítico en la posición sn-2 se digiere y absorbe más fácilmente. Al igual que la leche materna, Capricare es rica en ácido palmítico sn-2 natural, que contribuye a prevenir el endurecimiento de las heces y el estreñimiento que puede ocurrir cuando los lactantes consumen fórmulas a base de leche de vaca que contengan gran cantidad de palmítico en las posiciones sn-1,3.

Capricare se basan en leche entera, que contiene glóbulos de grasa láctea, rodeados por un MFGM. La MFGM, que también se encuentra de forma natural en la leche materna, contiene compuestos bioactivos que tienen beneficios comprobados para los lactantes, como ayudar al desarrollo del sistema inmunológico y cognitivo, la maduración del intestino y la protección contra determinados patógenos.

Estos compuestos bioactivos incluyen:

Fosfolípidos (incluida la esfingomielina). Proteínas específicas de membrana. Colesterol. Glucolípidos (incluidos gangliósidos). Capricare alivia el estreñimiento leve

Una de las diferencias más significativas con respecto a la leche de vaca se encuentra en la composición y estructura de la materia grasa de la leche de cabra. El tamaño promedio de los glóbulos grasos en la leche de cabra alcanza de 2,5 a 3,5 micrones, mientras que la de vaca es de 10 micrones. Su menor tamaño facilita una mejor dispersión y una distribución más homogénea de la grasa. No contiene aglutinina, por lo que sus glóbulos, al estar dispersos, son atacados más fácilmente por las enzimas digestivas y, por lo tanto, la velocidad de digestión es mayor.

Estudios clínicos realizados con Capricare, muestran que las heces de los lactantes alimentados con esta fórmula se asemejan en consistencia a las de los bebés alimentados con pecho, y que el número de evacuaciones es más frecuente y sin molestias. Esto es debido a que las fórmulas de esta marca contienen un 30 % de los ácidos grasos del palmítico en posición beta de triglicérido, lo cual favorece la absorción de dicho ácido graso.

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