La cardioprotección de Badalona se inicia en las farmacias. Los dispositivos portátiles son de uso público y se pueden utilizar en caso de episodio cardiaco sobrevenido.
26 de farmacias de Badalona, estratégicamente distribuidas por los distritos urbanos, ya cuentan con un desfibrilador portátil a disposición de cualquier persona que, ante una necesidad terapéutica, precise de su utilización en un episodio cardiaco sobrevenido. Ésta es la primera fase del proyecto ‘Badalona, ciudad cardioprotegida’, una iniciativa financiada por Menarini ...
26 de farmacias de Badalona, estratégicamente distribuidas por los distritos urbanos, ya cuentan con un desfibrilador portátil a disposición de cualquier persona que, ante una necesidad terapéutica, precise de su utilización en un episodio cardiaco sobrevenido. Ésta es la primera fase del proyecto ‘Badalona, ciudad cardioprotegida’, una iniciativa financiada por Menarini que tiene por objetivo convertirse en una de las primeras ciudades catalanas dotadas de dispositivos cardiacos de última generación para prevenir la muerte súbita. Éste se ha iniciado por las farmacias, en un programa que lleva por lema ‘la farmacia, el corazón del barrio’.
Así lo han explicado este jueves la alcaldesa de Badalona, Dolors Sabater; el general manager de Grupo Menarini, Salvador Pons; el presidente de la Asociación Barcelona Salud, el Dr. Josep Brugada, y Antoni Torres, presidente de la Associació de Farmàcies de Barcelona, con motivo de la presentación de "Badalona, ciudad cardioprotegida", un programa de prevención de las muertes súbitas mediante la instalación de estos dispositivos de desfibrilación automática.
La muerte súbita cardíaca, que en Cataluña provocó más de 3.500 defunciones en 2015, puede afectar a cualquier persona de forma inesperada. La primera hora desde la aparición de los síntomas viene precedida por la pérdida brusca de conciencia. Se disponen de 10 minutos para actuar e intentar salvar la vida de la persona. De aquí la importancia de que los desfibriladores se encuentren tan accesibles como sea posible.
En Cataluña, una de cada cuatro personas muere a causa de una enfermedad del corazón. Éste es un músculo que tiene un sistema eléctrico propio. Esta red eléctrica puede envejecer, tener cortocircuitos u otros problemas. Cuando no funciona bien, el corazón puede dejar de contraerse de manera sincrónica y pierde el ritmo. Es lo que se llama arritmia. La más peligrosa es la fibrilación ventricular que puede provocar la muerte súbita. Ésta multiplica por 16 los fallecimientos producidos por accidente de tráfico. El desfibrilador automático es un dispositivo de fácil utilización que sólo actúa en caso de necesidad y puede ser aplicado por cualquier persona, aunque carezca de conocimientos sanitarios.
El proyecto “Badalona, ciudad cardioprotegida” se desarrollará en el marco de un estudio científico avalado por el hospital Clínic de Barcelona – UB y en el que En el que participará el Hospital de Can Ruti, con el fin de evaluar durante los próximos cuatro años todos los casos que se hayan producido, y analizar sus resultados.
Este programa está impulsado por la Associació Barcelona Salut (ABS), Ajuntament de Badalona y Grupo Menarini, como parte de su programa de RSC. Además, cuenta con la colaboración de Fundació Brugada, Associació de Farmàcies de Barcelona (AFB), Generalitat de Catalunya, SEM y Col•legi de Farmacèutics de Barcelona.