Uno de los objetivos que persigue el curso, que empezará el 19 de mayo, es que la atención desde la farmacia contribuya a reducir el posible abuso de sustancias como las benzodiacepinas.
Un 13% ha aumentado –entre 2013 y 2014– la venta de productos para mejorar la calidad del sueño y evitar el insomnio, un trastorno que el 50% de los adultos sufre en algún momento de su vida, tal y como muestran datos extraídos del IMS Health. Las farmacias, gracias a ...
Un 13% ha aumentado –entre 2013 y 2014– la venta de productos para mejorar la calidad del sueño y evitar el insomnio, un trastorno que el 50% de los adultos sufre en algún momento de su vida, tal y como muestran datos extraídos del IMS Health. Las farmacias, gracias a su accesibilidad y proximidad, pueden jugar un papel importante en el consejo y recomendación de medidas específicas, y de esta forma, contribuir a reducir su incidencia. Es una de las premisas que ha tenido en cuenta Ágora Sanitaria a la hora de impulsar el curso “Recomendación farmacéutica en el insomnio”, con el patrocinio de Chiesi, que empezará el 19 de mayo. Se puede acceder a la inscripción a través de la web de Ágora Sanitaria.
El curso, de 6 horas lectivas y con casos prácticos frecuentes en la farmacia, proporcionará una serie de conocimientos útiles para que la atención farmacéutica ayude en la prevención de los trastornos del sueño y a mejorar la calidad de vida de aquellos pacientes que sufren insomnio en las diferentes etapas de su vida.
Concretamente, un ámbito en el que puede actuar el farmacéutico es en la deshabituación de benzodiacepinas, tema que se tratará en el curso con el fin de ofrecer a los farmacéuticos herramientas para que dispensen tratamientos de indicación farmacéutica aportando información personalizada sobre la medicación, promuevan el uso racional de los medicamentos y realicen el seguimiento de los medicamentos de prescripción dispensados. El 5% de los pacientes de atención primaria van al médico con el objetivo principal de recibir tratamiento por el insomnio, sin embargo, el problema puede aparecer cuando se perpetúa inadecuadamente la medicación.
Tal y como se dijo en la mesa redonda de Infarma Barcelona 2015 “Uso, abuso y deshabituación de psicofármacos”, habría que empezar a generar vías para retirar las benzodiacepinas a pacientes que no las necesitan, puesto que a pesar de que las guías de práctica clínica señalan que para el insomnio o la ansiedad se tendría que prescribir sólo durante tres o cuatro semanas, la resistencia a la retirada por parte del paciente o los síntomas de abstinencia dificultan dejar el tratamiento.
Otros aspectos que se abordarán durante la formación serán cómo aplicar las guías de actuación para realizar el abordaje del paciente de forma correcta, valorar cuándo conviene derivar al médico y recomendar medidas higiénicas y dietéticas para el tratamiento y prevención del insomnio.