El documento ha sido coordinado desde el Consell de Col·legis Farmacèutics de Catalunya (CCFC) con el Grupo de Dermatología de la Societat Catalana de Medicina Familiar i Comunitària (CAMFiC).
¿Cuáles son las consultas relacionadas con la piel más frecuentes en la farmacia? ¿Cuál es la mejor recomendación en casos como hongos en el pie, herpes en la boca, acné o manchas blancas en la cara de los niños? Son cuestiones a las cuales da respuesta la guía “Atención compartida ...
¿Cuáles son las consultas relacionadas con la piel más frecuentes en la farmacia? ¿Cuál es la mejor recomendación en casos como hongos en el pie, herpes en la boca, acné o manchas blancas en la cara de los niños? Son cuestiones a las cuales da respuesta la guía “Atención compartida de problemas de la piel de baja complejidad en la farmacia comunitaria”, un documento elaborado por farmacéuticos comunitarios y médicos de familia catalanes que persigue optimizar la atención a pacientes que acuden a la farmacia comunitaria con este tipo de demandas.
La iniciativa, coordinada desde el Consell de Col·legis Farmacèutics de Catalunya (CCFC) con el Grupo de Dermatología de la Societat Ca talana de Medicina Familiar i Comunitària (CAMFiC), ha estado patrocinada por Laboratorios Almirall. Se empezó a trabajar en el marco de las líneas estratégicas del Plan de Salud 2011-2015, el documento estratégico de la salud catalana que contemplaba la existencia de un sistema integrado más resolutivo desde los primeros niveles y en el territorio y, más concretamente, la elaboración de procedimientos de gestión compartida de enfermedades de baja complejidad, elaborados y consensuados con las principales sociedades científicas del mundo médico y farmacéutico.
¿Qué hacer ante los motivos de consulta más frecuentes en la farmacia?
A partir de los protocolos de actuación con algoritmos de decisión que recoge la guía, se contribuye a orientar, facilitar y homogeneizar la actuación farmacéutica en 23 de los motivos de consulta relacionadas con la piel de baja y muy baja complejidad más frecuentes en la farmacia comunitaria, indicando desde la correcta orientación de la demanda, hasta su resolución a través de la indicación farmacéutica o su derivación eficaz al médico en caso de que sea necesario. Por otro lado, de cada consulta se incluye un cuadro con las características diferenciales de las lesiones y un conjunto de imágenes que favorezcan a identificarla.
A su vez, el documento también incluye una serie de síntomas y signos cutáneos que pueden motivar la consulta en primera instancia y recursos que pueden emplear los farmacéuticos para la generación de listados de medicamentos y principios activos relacionados con una patología en concreto.
La formulación magistral en la curación de la piel
Uno de los recursos terapéuticos con que cuenta el farmacéutico en la curación de lesiones de la piel y que aparece en la guía es la formulación magistral. Esta herramienta permite, entre otros aspectos, cubrir lagunas terapéuticas (por ejemplo, en el tratamiento de mucosas o uñas), solucionar dificultades de encontrar ciertos tratamientos, asociar principios activos para ayudar a que el paciente pueda seguir la medicación más fácilmente (en muchos tratamientos de psoriasi) y sustituir excipientes que puedan ser perjudiciales (por ejemplo, cápsulas sin lactosa para los intolerantes a esta sustancia).
Desde la farmacia también se puede recurrir a la cosmética individualizada en base a las necesidades específicas de un paciente. Un ejemplo sería elaborar una fórmula para hacer frente a síntomas como el prurito en personas mayores –definida como la sensación de malestar en la piel que provoca un deseo irreprimible de rascarse–, puesto que al tener la piel sensible e irritada tiende a ulcerarse por el rascado.